Jump to content

Redyan Lyrudre - Prácticamente Magia (Historia, Relatos y Escritos)


Mensajes Recomendados

Redyan Lyrudre - Prácticamente Magia

redyan01.jpg

(Redyan)

“En el interior de todos y cada uno de nosotros existe una verdad, auténtica, única. Algo con lo que nacemos, que es nuestro y solo nuestro. Algo que no se puede enseñar ni aprender. Es importante mantenerlo vivo, pues con el paso del tiempo el mundo puede nublar esa verdad y queda enterrada en nuestro interior, bajo todos los - habría, podría, debería - . Hay quienes llegan a olvidar… hay quienes llegan a olvidar esa verdad.”

Recuerdo cuantas veces me decía eso Dhalassir. Al principio no lo comprendía, luego creía entender y a día de hoy curiosamente todavía no lo se. ¿Puede que fuera demasiado joven? ¿Puede que fuese demasiado inexperta? O quizá, solo quizá, es que aun no conocía esa verdad, no puedes olvidar algo que aun no conoces, ¿no?

Sin embargo el verbo “conocer” siempre ha estado ligado a mi carácter desde niña. Si me preguntasen a qué he dedicado estos años, precisamente respondería “a conocer”. Las ansias de saber las llevo arraigadas desde que descubrí aquel maravilloso libro sobre magia, en el viejo escritorio de Dhalassir, cuando aun tenía que ponerme de puntillas para llegar a alcanzarlo. - “No es una lectura apropiada todavía, pequeña” – me dijo, mientras apartaba con suavidad mi curiosa lectura, privándome de ésta.

redyan02.jpg

(Redyan y Dhalassir)

Dhalassir era una persona comprensiva, inteligente y paciente, sobretodo conmigo. No era algo de lo que pudiera quejarme, después de todo él y su mujer Eyrille, se habían hecho cargo de mí tras la muerte de mis padres.

Poco a poco me fue inculcando parte de su paciencia, prometiéndome que cuando fuese el momento me mostraría aquello que tanta curiosidad provocaba en mí. Y tal como prometió, lo hizo, a su manera por supuesto, poco a poco. Así fue como unos años más tarde empecé a ayudarles en la pequeña tienda. Nada más entrar quedé fascinada. Posiblemente era una nimiedad, pero mis ojitos inexpertos no podían dejar de observar todos aquellos artilugios y preguntándome para que servirían, que usos tendrían y sus diversos empleos.

No iba a aprenderlo todo en un día, pero mis ansias de conocer, provocaron en mí una verborrea en cadena de preguntas. Cuando tras eso, posé mis ojitos en Dhalassir, éste no pudo evitar reírse. Hinché mis mofletes aun mirándole y entonces sonreí asintiendo.

Eyrille ocupaba su tiempo en una pequeña salita al fondo, separada por una cortina. En su interior había un par de mesas con muchos frascos, tubos, viales y líquidos que circulaban por éstos al ritmo del calor del fuego. Ella me enseñó principios de la alquimia, sus propiedades y pequeñas ciencias que aplicaba para fabricar todo tipo de pociones y elixires.

Me acerqué a la mesa de frascos mientras ella proseguía explicándome, observé uno de ellos, de color rojizo, lo tomé con mis manos volteándolo para leer su etiqueta “Poción de amor”, hice una mueca parpadeando y volví mi mirada hacia Eyrille.

- ¿Para que sirve? – pregunté dubitativa.

- Quién la toma puede compartirla con aquella persona a la que quiere enamorar. Sirve para eso. – me respondió Eyrille sonriéndome.

Me quedé pensativa unos instantes y volví a mirarla.

- ¿Y que es enamorar? – volví a preguntarle ingenua.

- Cuando te pase lo sabrás, pequeña. – me respondió riéndose.

- Eso es como responder que el agua no sabe a nada. – protesté. – ¿Si nadie me lo explica, como voy a saber? –

- Es lo más mágico que pueda existir, por eso no se puede explicar, lo sabes cuando lo experimentas, pues son sentimientos. – trató de decirme.

Yo seguía sin entenderlo.

- ¿El amor es mágico? – ladee la cabeza curiosa - ¿Se hace con un hechizo? – pregunté.

Eyrille volvió a reírse y eso provocó en mí un poco de indignación. La ambigüedad de sus respuestas no alcanzaba en mi entendimiento.

- No, no es un hechizo. Cuando dije “magia” no me refería a la magia que usamos, que fluye en el mundo como “poder”, usé esa metáfora para describir algo que es “maravilloso” y que nos eleva nuestra esencia, puede hacernos sentir felicidad o tristeza, melancolía, muchos sentimientos.” – volvió a tratar de explicarme.

- ¿Entonces porque fabricas pociones para eso? – pregunté en mi duda.

- Hay quienes creen que nunca lo encontrarán o desean que alguien concreto sienta amor por ellos. – me contestó.

- Ah… - asentí y luego negué. – Pero si no es una “magia” pero puede conseguirse con una poción, ¿entonces…? – añadí.

Eyrille me sonrió sin contestar a mi pregunta, se acercó tomando el frasco y lo depositó en mi mano.

- Quédatela. Si en un momento dado crees necesitarla úsala, pero deberás meditarlo bien. Yo creo que no te hará falta. – me dijo con una sonrisa.

- ¿Es como una prueba? – contesté creyendo eso.

- Quizá lo sea algún día, deberás descubrirlo por ti misma. – me terminó diciendo.

Aquella conversación fue otra de tantas cosas que a día de hoy, aun no lograba comprender y a pesar de ello aguardé ese frasco, llevándolo conmigo, como si de un misterio existencial se tratase, un acertijo que me quedaba pendiente y debería descifrar algún día.

Dhalassir viajaba una vez al mes a la gran capital de Quel’thalas, Lunargenta. Solía reunirse allí con proveedores, vendedores y hacía sus negocios para la tienda. Me encantaba acompañarle. La ciudad me maravillaba, sus calles, las gentes. Observaba con entusiasmo y a menudo jugaba con mi mente a analizar los gestos de los estudiantes de magia que se reunían alrededor de la gran fuente, como si pudiese aprender algún hechizo solo de verlos. Lógicamente no sacaba gran cosa de ello, pero esos minutos me bastaban para soñar que algún día podía estar yo entre ellos, conversando de interesantes descubrimientos o de los últimos hechizos que habrían mostrado los tutores. En realidad no tenía ni pizca idea de lo que era, lo que representaba formar parte de ese mundo. La única certeza que tenía de eso, era que ansiaba saberlo, algún día.

Lo que sí sabía es que Dhalassir conocía mi sueño con claridad y hacía lo posible para reunir dinero suficiente para que cuando fuese mayor, ingresase en la academia de Lunargenta.

Yo había escuchado muchas cosas de la grandiosa Dalaran, aunque nunca había visto esa ciudad. Dhalassir me relataba a veces sobre ésta. Decía que era la mayor nación de magos. Allí se reunían los mejores y más prestigiosos. Pero igual sabía que su acceso era imposible para mí y también me inculcaba el saber de esas limitaciones. Si bien vivíamos cómodamente, no éramos ricos. Así que me limitaba a deleitarme con esos relatos, que me sumergían en sueños mientras los escuchaba.

Con el pasar de los años, Dhalassir mismo me instruyó en las prácticas más básicas de la magia arcana. Él sabía encantar objetos, aplicaba la magia en estos. Armas, reliquias, talismanes, incluso sellaba magia en bordados de armaduras y tejidos.

Todavía recuerdo las primeras lecciones que me inculcó, mientras paseábamos por las cercanías del estanque cercano a la villa.

Me habló de las líneas ley, su recorrido a lo largo de Azeroth, su conexión entre los planos, su procedencia. Obviamente al principio me era muy difícil entender pero poco a poco fui logrando practicar aquellas teorías. Extraer ese fluyente, manipularlo ligeramente. Era mucho más complicado de lo que pensaba, pero mi obstinación me provocaba que eso lo hiciera más interesante para mí. Era un reto. La obstinación fue creciendo al ritmo que lo hacía yo, marcándose en mi carácter, dejando atrás la niña curiosa que deseaba solo “conocer” y floreciendo al pasar los años, una joven testaruda, amante del “querer”. Ya no solo quería conocer las cosas, deseaba probarlas, veía delante de mí esos retos, esos misterios, tantos conocimientos por aprender, parecían infinitos.

Dhalassir tenía sus limitaciones, pues no era tampoco un verdadero mago, aunque había sido un buen maestro a mi parecer. Estaba agradecida de sus enseñanzas. En ese entonces había dejado de ser una ayudante y pasé a trabajar con ellos en la tienda como encantadora.

Por otro lado ocupaba mis ratos libres devorando libros sin parar, tratando de comprender autodidacta sobre éstos. No era fácil conseguirlos, pero mi amistad con Niere, me hizo accesible algunos realmente interesantes, apasionantes diría yo. El hermano de Niere estudiaba en la academia de Lunargenta y a menudo entrábamos en sus aposentos “confiscando” temporalmente esos deseosos libros que hablaban de conjuros, empleos, aplicaciones mágicas, teorías… la mitad de las veces no me servían más que para aumentar mis dudas, curiosidades o apetito de saber realizar lo que exponían. Pero me eran suficientes, para hacer de la gran espera, algo más llevadera.

- ¿Cuándo podré empezar en la Academia? – preguntaba a menudo a Dhalassir.

Aquella pregunta comenzó a salir de mis labios cada vez más y más, con ansia. El motivo de ello había sido la llegada de un joven mago en la villa. Ni siquiera sabía su nombre aunque eso no era lo que más me interesaba en ese preciso momento, sino los conocimientos que tenía. Por varios días me sentaba cerca de la plaza, escuchando con el mayor disimulo que podía, sus conversaciones. Había visto estudiantes antes, sí, pero nunca había podido escucharles de cerca. Lo que decía, alimentó mis ansias de partir a la capital. Miraba sus ropas, su forma de expresarse, el modo en que mantenía la postura frente a los demás. Me imaginaba por momentos a mí misma con esas mismas ropas, con esa seguridad, conversando inteligentemente. ¿Conseguiría algún día estar cerca de alguien así? De repente me sentí pequeña, ligeramente frustrada, casi sin saber porqué. Pero me creó mal estar esa sensación. Nunca antes había experimentado la frustración de sentirme menos que otros y no me gustaba, aunque intenté apaciguarlo, quedó mínimamente latente en mí.

redyan05.jpg

(Redyan y Alathen)

La última vez que vi al mago, fue en su partida de la villa, mientras se despedía de un elfo de porte bastante serio, supuse que sería su padre, aunque no tenía ni idea en realidad. Me había escondido tontamente entre los árboles que cubrían el camino de salida. El motivo fue porque presencié como ambos discutían y mi curiosidad me hizo una mala pasada, pues éstos se dieron cuenta de mi presencia. Ojala hubiese sabido un conjuro de invisibilidad, pero me habría bastado uno de “tierra trágame”, para no pasar ese mal trago, cuando tras discutir ambos se detuvieron un instante y el joven mago miró fijamente hacia donde creí haberme escondido a la perfección.

- La curiosidad y el saber no es algo malo. – dijo éste alzando la voz sonriendo divertido. Pues lo hacía a conciencia sabiendo que lo escucharía.

- El saber es una virtud que no a todos debería ser concedida. – respondió el otro elfo mirando fijamente indignado al joven mago.

- ¿Vos que opináis? – volvió a sonreír, dirigiendo su mirada hacia el árbol y haciendo un ademán para que saliese al descubierto.

Ese instante fue como si un rayo cayese sobre mí, tragué saliva dudando si acercarme o salir patéticamente corriendo. Al final opté por acercarme, tratando de no dañar la poca dignidad que me quedaba.

- La curiosidad está en la naturaleza de algunos, c..creo yo. – me atreví a responder nerviosa.

- ¿Lo veis, padre? Ella también está de acuerdo. – respondió mirando con orgullo al elfo altivo.

- Tu curiosidad no te ha traído nada próspero. Márchate a la capital. Ojalá allí consigas sentar la cabeza. – le respondió el elfo altivo.

- Pse, quizá me hayan hecho un favor, la limitación excesiva de Dalaran, me provoca aversión. – respondió a desgana el joven mago.

- ¡Oh, oh! – exclamé sin meditar mis palabras. - ¿Estuvisteis en Dalaran? – mis ojitos se posaron con gran interés en el joven mago.

- Esos arrogantes creen saberlo todo, pero utilizan el conocimiento de otros para apropiárselo. No os perdéis nada. – me respondió.

- P..pero… - iba a discrepar con su pensamiento, pero opté por acallar.

Después de todo, que sabía yo. Nunca había estado allí y ni siquiera esa conversación era de mi incumbencia.

- Jovencita, mejor será para vos, marcharos a vuestra casa. Preferiréis que no le informe a vuestros padres de que escucháis a hurtadillas las conversaciones de los demás. – me dijo amenazante el elfo altivo.

- A veces hay que romper las normas para aclarar las cosas. – vaciló enigmáticamente el joven mago.

- Y..yo, lo siento mucho señor, no volverá a ocurrir. – me disculpé balbuceando nerviosa.

El padre del joven mago, le clavó una mirada penetrante y amenazadora. No quise inmiscuirme más en sus asuntos. Me despedí con el mismo nerviosismo con el que salí aprisa de allí.

Aquél curioso encuentro me hizo pensar muchas veces. Sobre lo que les había escuchado decir, intenté encontrarle algún sentido, otro más de mis enigmas a descifrar. Otra tarea pendiente sin resolver.

No volví a saber sobre ese joven mago, supuse que habría partido a la ciudad y allí permaneció. Lo que si supe es que su padre, murió, como tantos otros en la batalla, cuando la plaga penetró en nuestras tierras, arrasando todo a su paso.

“Siempre resulta sorprendente, que parte de la vida es ocupada por momentos significativos. Con frecuencia, pasan una vez aún antes de empezar, aunque dejan un halo de esperanza, para el futuro. Y hacen de las personas que lo originan inolvidables.”

Esas fueron las últimas palabras que Eyrille pudo decirme antes de morir. La sostuve entre mis brazos, mis ropas se empapaban con su sangre y la desesperación empezó a aflorar en mi interior. Desesperación, desconcierto y desolación. Sentía por igual impotencia, viendo lo que estaba ocurriendo. Como en tan escasos días, todo aquello que amaba era destruido.

Dhalassir murió pocas horas después, mientras tratábamos de escapar de la villa. Él permaneció unos metros atrás mientras cargábamos lo indispensable en el carro, junto a la familia de Niere. Su suerte no le sonrió y en acto reflejo, el carro comenzó a partir, viendo como un grupo de muertos vivientes, se acercaban velozmente hacia nosotros. Él no pudo llegar a tiempo. Cubrí mi rostro con las manos, evitando presenciar lo que ocurría, mientras sus gritos penetraban en mi cabeza amartillando audibles y se desvanecían lentamente a medida que nos alejábamos.

Nos escondimos cerca del arroyo, un lugar apartado de todo, pasamos allí días, me parecieron semanas y mi silencio atormentaba a Niere. Pero no tenía palabras que pudieran describir lo que sentía.

- Cuando una persona que tiene mucho que decir, no habla. Su silencio es atronador. – me dijo Niere con tristeza.

La miré reflejando en mis ojos la desolación y dejé que el llanto de mi dolor hablase por mí misma.

Todo aquello fue muy duro, me hizo encerrarme más en mi misma. Con el tiempo la herida fue sanando, pero la cicatriz que había dejado latente, no podía borrarla, ya formaba parte de mí ser.

Las cosas cambiaron radicalmente, no solo mis esperanzas, sino todo alrededor. La destrucción del pozo del sol, afectó sobremanera en todos. Quel’thalas quedó marcada con esa misma cicatriz, que de igual modo metafóricamente todos portábamos, también era visible en la tierra.

Sobrevivir a aquello nos hizo tomar un camino difícil. La Alianza abandonó a nuestro pueblo, nos traicionaron, dejándonos a nuestra suerte. Y ésta no fue muy favorable, al menos no lo fue para mí. Niere y su familia, decidieron partir al Sur. Me sentía indignada por ello. ¿Abandonar nuestra tierra? ¿Nuestro hogar? No era lo que yo quería. A mi pesar, me desligué de su compañía frustrada al no compartir sus opiniones.

Así fue como empecé mi nueva vida, con otro nombre y todo nuevo a mí alrededor. El pasado era un recuerdo que parecía solo un sueño. Estaba demasiado cargado de recuerdos con esperanzas que ya no tenían sentido. No se si duró seis años, más o menos. Sólo se que ocurrió y que ahora todo es diferente. Como tenía que ser tal vez o es como quiero que sea.

Viviendo en la capital ahora, solo conservo algunas cosas de entonces. Mi viejo cuaderno, aun aguarda todos esos enigmas que espero resolver. El dinero que ahorró Dhalassir, intentaré poder reunir lo que falta para continuar mis enseñanzas. Los conocimientos de las cosas que aprendí y mi fascinación por descubrir el ilimitado mundo de la magia que abrasa en mí ser desde siempre.

Para averiguar si seré la heroína de mi propia vida habrá que leer hasta el final…

redyan03.jpg

(Redyan)

“Terminó de escribir eso último tras re-leer todos los recuerdos que contenían en esas páginas. El motivo… de nuevo la plaga había hecho mella en Quel’thalas y ahora Redyan volvía a recobrar el recuerdo que tenía aguardado en su interior, su pasado.”

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias I

Redyan tomaba su viejo y desgastado cuaderno para escribir como a menudo sus relatos, pensamientos y reflexiones:

¿Sobrevivir o vivir?

En los siete años que han pasado tras el cambio a mi nueva vida, hay cosas que se repiten, una y otra vez. Preguntas que no logro resolver ¿sabrá alguien la respuesta? Puede que no... sin embargo, tengo claro, desde el momento que logré sobrevivir a lo ocurrido, me prometí a mí misma una cosa, "que no sería en vano". Veo a diario en las gentes, pintado en su rostro la derrota, la desolación, la tristeza, la pérdida, no es diferente de lo que sentí yo, pero ¿para qué vivir así? Uno luchó para seguir adelante ¿no? esa es la idea, ¿entonces porque no hay más que lamento? mirar atrás, si bien, me recuerda una lección aprendida, es todo cuanto puedo tomar de ello, pero ¿lamentarlo eternamente? No he llegado hasta aquí, para eso y no comprendo porque la mayoría así lo toman. Vivir de ese modo, agonizando cada vez que te levantas de la cama, sopesando día tras día tras día, ¿sobreviviste para vivir en sufrimiento? que forma de desperdiciar tan benevolente oportunidad. Prefiero pensar que si se me ha brindado la oportunidad de seguir viviendo, debo aprovecharla, ¡disfrutar de ello! No solo hay sufrimiento en el mundo. Quizá es que veo lo que los demás no ven. Lo que los demás deciden no ver, por temor, conformismo o pereza. ¿Ver el mundo de forma nueva cada día? Hay infinidad de cosas que no conozco, que quiero ver, saborear, vivir, sentir y disfrutar. Tantas y tantas cosas que aguardan en alguna parte esperando que alguien las mire, las descubra y diga "esto, no es cualquier cosa, esto tiene importancia ahora, en este instante, mientras lo observo". Creo que, incluso hay personas así. Aparecen en algún momento crucial de nuestra vida, puede ser tan solo un instante, pero dejan pequeños conocimientos, resquicios al descubierto. Se puede aprender mucho solo de observar a las personas, es variado, todos aguardamos diferentes conocimientos, formas de pensar, de actuar, incluso secretos. Ahora comprendo algo más las palabras de Eyrille cuando me dijo que “Siempre resulta sorprendente, que parte de la vida es ocupada por momentos significativos. Con frecuencia, pasan una vez aún antes de empezar, aunque dejan un halo de esperanza, para el futuro. Y hacen de las personas que lo originan inolvidables.”, creo que se refería a eso. Las personas nos cruzamos entre sí en este mundo por algún motivo, sea longevo o tan solo un mero instante y puede ser significativo. Creo que intentaba decirme que tuviese la capacidad de ver esos instantes, no eludirlos, saber darle importancia a todo, hasta esos pequeños detalles que a menudo pasamos por alto o éstos nos son casi desapercibidos.

Tengo claro ese pensamiento y si bien las cosas no me son fáciles, no pienso rendirme ¿para eso sobreviví no? Claro, para seguir "viviendo".

Lo cuotidiano

Por el momento me he instalado en una mugrienta y vieja habitación, en el barrio más horrible de la ciudad. Y oye, tiene hasta su encanto, al mal tiempo buena cara, tampoco puedo permitirme nada mejor. Ya me he acostumbrado a lidiar con los borrachos que se empotran en mi puerta, solo tengo que apartarlos de una patadita cada vez que quiero salir. En el fondo son inofensivos, se pasan el día tumbados en el suelo. Eso me deja clara una cosa "No beber alcohol".

He aprendido a implementarme mi propia disciplina, intento por todos los medios levantarme a una hora decente y voy progresando en mi mediocre negocio. ¿Porque es mediocre? Bueno, sencillo, no tengo clientes. ¿Porque digo que progresa entonces? Más fácil todavía, pues he conseguido un set de alquimia, algo viejo, pues es de segunda mano, pero, me permite empezar a fabricar pociones.

Y lógicamente en mi disciplina he creado una lista de metas y deseos a corto plazo.

Cosas a conseguir:

  1. Un set de alquimia nuevo
  2. Fabricar pociones y venderlas (Si no consigo eso, pasar al plan B)
  3. Plan B: ¿Vender encantamientos?
  4. Conseguir el dinero que me falta para entrar en la Academia.
  5. ¿Estudiar magia?
  6. Saber que diantres es de verdad el amor. (en caso de no conseguirlo, pasar al plan C)
  7. Plan C: Suministrar la poción de Eirylle (lo sé, es rastrero, pero quiero experimentar)
  8. Conocer personas interesantes
  9. Vivir alguna aventura
  10. Comprar más pastelitos (es que se me han acabado...)

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias II ¿Amistad, interés, amor?

¿Amistad o Interés?

Dicen que la amistad es un tesoro de valor incalculable. A día de hoy, no estoy tan segura de que así sea. O eso, o solo he encontrado personas equivocadas. El caso es que por el motivo que sea, se me repite una y otra vez el mismo patrón.

Casi todas las personas que he ido conociendo en estos días tienen interés bajo la palabra "amistad"

Respecto a eso una vez leí curiosa moraleja sobre este tema, decía así:

y es que realmente me pregunto si existe ese verdadero lazo...

"Gran rey y emperador de un lejano país, fue avisado del peligro que acechaba en un rincón de sus tierras. Éste, se reunió con sus consejeros y jefes de guerra, les dijo: "Vamos. Seguidme. Pronto destruiré a mis enemigos."

Cuando el emperador y sus tropas llegaron a donde estaban los rebeldes, él trató afablemente a éstos, quienes, por gratitud, se sometieron a él de nuevo.

Todos los que formaban el séquito del emperador pensaron que él ordenaría la inmediata ejecución de todos aquellos que se habían sublevado contra él; pero se sorprendieron en gran manera al ver que el emperador trataba humanitariamente y hasta con cariño a quienes habían sido rebeldes.

Entonces el consejero principal preguntó con indignación al emperador:

¿De esta manera cumple vuestra Excelencia su promesa? Dijisteis que veníamos a destruir a vuestros enemigos. Y los habéis perdonado a todos, y a muchos hasta con cariño los habéis tratado.

Entonces el emperador, con actitud generosa, dijo:

Os prometí destruir a mis enemigos; y todos vosotros veis que ya nadie es enemigo mío: a todos los he hecho mis amigos."

A día de hoy no comprendía del todo esa moraleja, pero ahora, creo que me será útil. ¿Puede que yo también comportase errónea? No puedo negar que a menudo, me cuesta evitar usar a interés, más solo cuando veo enseguida que los demás me miran con esa misma intención. En realidad, a menudo me parece la gente tan previsible que cuesta no hacer uso de esa ventaja. Hay que ser buena, sí, pero no idiota. Aunque no negaré, quisiera de veras encontrar alguien afín, alguien a quien poder contar lo que pienso, lo que busco, mis sueños, que entienda como veo el mundo y sin temor a traición. ¿Es una utopía? Quiero creer que no, pero supongo que si es tan valioso, no será fácil de hallar. Trataré de tener paciencia y no cerrarme a dicha oportunidad.

Por ahora el único que parece no mirarme cual loca es Lanthal, curiosamente, un joven brujo. Quizá teme que cuente ese secreto, pero parece inofensivo. No entiendo porque sigue esa senda, ni siquiera me da la sensación de que le guste serlo. Sin embargo, ha sido un compañero interesante. Conseguimos robar una tablilla de oro Troll y ésta me ha proporcionado un incremento de mi economía. Ahora compartimos habitación en una posada decente y compré un set de alquimia nuevecito. ¿He mencionado que luché contra esos Trolls a pedregadas? ¡Ah! ¡Fue increíble!

También conocí a Herendil, aunque vagamente. Es un curioso noble y me decanto a clasificarle en el lado del interés. Se dedica a jugar a las cartas, estafando a placer. No opinaré que me parece una mala práctica, después de todo, gracias a una de sus partidas he logrado entrar en la Academia del Ocaso Marchito. ¡Sí! ¡Al fin soy una estudiante formal! Bueno... formal, quizá esa no sea la mejor palabra para definirme, peculiar, para que negarlo, pero después de todo, una estudiante más, sí.

¿Amor?

Complejo. Sigo sin entender ese concepto. Por más que indago en ello, las respuestas son similares. "Lo sabré cuando me ocurra". Vale, ¡pero es que no quiero que me ocurra!. ¡Oh no! Y menos después de que me hayan descrito los síntomas principales. Empiezo a pensar que es más una maldición que otra cosa. ¿Quién puede querer tal dependencia? ¿Porque buscan las personas depender de otra?

Como no conseguí respuestas que me indicasen demasiado, tomé el plan C: Suministrar la poción que me dio Eirylle. Y sí, lo hice. Puse un poco en el Ron del pirata Ithalos. Me pareció un interesante experimento, dado que los piratas no son abocados a lazos, todo el mundo sabe que adoran la libertad y el mar, no están hechos para tales ataduras. Después del experimento y de analizar lo sucedido llegué a varias conclusiones e hice un pequeño informe personal:

"El amor es una inclinación del alma hacia una persona. No podríamos hablar del alma si no se sabe con certeza que el alma existe, así que tendremos que asemejar el alma con algo que si sabemos con certeza; como los pastelitos (me encantan). El amor influye a la mente, controla en cierto grado las acciones del que lo padece.

Nuestra mente está dividida en varias partes psicológicas: el razonamiento, nuestra personalidad, la memoria y los sentimientos. Digamos que con el razonamiento podemos realizar sin fin de acciones y la memoria guarda siempre un registro (y mucho más). Nuestra personalidad define los gustos que tenemos y a su vez los sentimientos que tomamos frente a determinados gustos. Cada gusto que se guarda en nuestra memoria y es procesado por nuestra personalidad despierta un sentimiento.

No podemos elegir una razón lógica por la cual nos gustan las cosas. No podemos decir "porque nos gusta bailar, comer pastelitos, leer, etc". Cuando alguien ve otra persona y dice "ella/él me gusta" no tiene ni la más remota idea del porque le gusta, pero cuando se tratan afirmaciones del porque "le gusta" lo único que puedo decir es "la estructura de su mente reacciona frente a situaciones de una determinada manera". Me atrevería a afirmar que es atolondramiento mental. Una combinación de señales cerebrales que producen un sentimiento o una reacción en nuestro razonamiento o en la personalidad, y es entonces cuando uno cree estar enamorado."

Cosas a conseguir (pendientes):

  1. Fabricar pociones y venderlas (Si no consigo eso, pasar al plan B)
  2. Plan B: ¿Vender encantamientos?
  3. ¿Estudiar magia?
  4. Conocer personas interesantes
  5. Comprar más pastelitos (nunca me canso de comerlos...)

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Estudios: Izal-Shurah y las Islas Abruptas

Tras un largo recorrido en este viaje, fui recopilando la información que he podido extraer de libros, contrastando unos con otros, junto a lo que vi, la historia y los libros recuperados.

Las Islas Abruptas son una cadena de islas, resucitadas del fondo del mar por Gul'dan, que se encuentran al Sur del Maelstrom. Están ubicadas en los mares del Sur e incluyen cerca de cuatro grandes islas y tres pequeños islotes.

Muchas antiguas ruinas pueden encontrarse en estas islas, incluyendo la antigua ciudad de Kaldoreis, llamada Suramar. Se conoce que la "Tumba de Sargeras" está escondida en algún rincón de estas islas. Sin embargo también se sabe que ésta fue visitada por Illidan Stormrage, quién robó el "Ojo de Sargeras" de la tumba. El agua entre las islas se conoce como la Bahía de Stormreaver, ya que este era el lugar Gul'dan y su clan ancló sus naves cuando exploraron antaño las islas. Balor, puede ser un islote de estas islas rotas y perdidas.

Se afirma que 2.000 habitantes viven en estas islas, casi todos ellos criaturas desagradables de varios tipos. Estos viven sin gobiernos, ni Capital y se encuentran bajo el Imperio marítimo de la Sacerdote Harash. No hay grandes asentamientos; Unas cuantas chozas y campamentos son todo lo civilizado que se puede encontrar. Estos habitantes marítimos están afiliados con los Naga.

Historia

En el pasado, Aegwynn, Guardiana de Tirisfal, luchó contra el avatar de Sargeras. Sabiendo que el cadáver del titán oscuro todavía tenía poder, buscó un lugar seguro para enterrarlo. Aegwynn colocó su cuerpo en una tumba y lo echó en unas ruinas Kaldorei cerca del Maelstrom, creyendo que sería seguro.

Sólo unos pocos restos de una gran isla en el gran mar se quedaron. Estas islas son de poco valor estratégico, siendo la mayor de poco más de una milla de longitud.

El Clan Stormreaver mostró un interés inusual en explorar dichas islas. Las fuerzas del Clan Stormreaver y el clan Twilight Hammer se movieron a través de las islas hacia el final de la Segunda Guerra. Más tarde se supo que dichos clanes estaban fortaleciendo una isla en la que Gul'dan había planteado, para conseguir encontrar la Tumba de Sargeras. En lo más reciente, las grandes islas que se encuentran hoy son llamadas, Islas Abruptas.

Durante la Tercera Guerra, Maiev Shadowsong persiguió a Illidan Stormrage en estas islas, mientras éste buscaba el Ojo de Sargeras. Maiev, descubrió los restos de Suramar, la Capital antigua de Kaldoreis allí. Finalmente Illidan Stormrage consiguió el Ojo de Sargeras, pudiendo así escapar nuevamente de su carcelera.

Localización

Las Islas Abruptas están siendo absorbidas por el Maelstrom, posiblemente sean destruidas en algún momento por la fuerza mágica de la tormenta. Esto explicaría que las islas se "muevan" por el Maelstrom. Más o menos podría decirse que están de camino a Balor y Kul'Tiras, pero no es un cálculo exacto.

Posible mapa de su localización respecto Azeroth:

wow_world_map.jpg

Balor:

Balor fue un territorio insular de Azeroth que descansaba al oeste de Stormwind bañado por el Gran Mar, que fue ocupado por los orcos del Clan Stormreaver de la antigua Horda durante la Primera Guerra y probablemente liberado tras el fin del conflicto.

Se rumorea que pudiese haber cambiado de nombre tras la eclosión de las islas de los mares del Sur. También se especula todavía puedan vivir algunos orcos del Clan Stormreaver.

Se dice en leyendas también que su nombre, Balor, proviene del mismo Rey Balor, un gigante de mar. Escuchó una profecía de que su nieto le mataría y por ello encerró a su propia hija en una torre para que ésta jamás pudiera aparearse.

Izal-Shurah:

Izal-Shurah que una vez fue una gran biblioteca de Altonatos en la ciudad de Suramar, pero ahora está en ruinas en las Islas Abruptas. Maiev fue la primera que encontró la biblioteca de esa isla, tomó algunos libros de ella, por otra parte se conoce que el lugar estuvo custodiado por un Señor Makrura.

En la antigüedad, Izal-Shurah fue una gran biblioteca. Posiblemente la civilización Kaldorei que lo creó, tuvo la previsión para sellar sus libros y pergaminos. Nagas y Makruras han invadido el lugar en la actualidad, entre otras criaturas.

Arauk.jpg

Suramar:

Suramar fue la antigua capital de los Kaldorei (Altonatos) y el hogar natal de Tyrande Whisperwind y los hermanos Malfurion e Illidan Stormrage. Sus ruinas son ahora lo que quedan de ese entonces. En el centro de las mismas, se encuentran dos grande álamos cuyos troncos permanecen unidos pese al paso del tiempo. En la antigüedad, en ese mismo lugar se alzaba un gran jardín que servía como centro neurálgico de la ciudad y que era conocido como las "Ramas de Azshara". Hoy solo quedan sus restros petrificados.

Durante la época de la Reina Azshara, la comunidad religiosa de Suramar creció hasta convertirse en una complicada estructura jerárquica que intervenía en todos los aspectos de la comunidad. Sus academias arcanas fueron una de las más grandes de la época y cuna de generaciones enteras de magos. Una de las partes de Suramar, el distrito donde se encontraba el templo, estaba situado junto al Pozo de la Eternidad, que aparentemente compartía con la ciudad de Zin-Aszhari. Era allí también donde se encontraba el Palacio Eterno, residencia de la Reina Azshara. Esta zona de la ciudad fue el campo de batalla durante los últimos coletazos de la Guerra de los Ancestros. Izal-Shurah y Arauk-Nashal se encontraban originalmente también aquí.

  • Me Gusta 1
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: ¿Existencialidad?

¿Contraste de Información?

He estado buscando en diferentes libros con referencias histórica, filosófica y distintas creencias. Tras la última visita con Vennya al anticuario de Rayan, escuché entre ambos sobre los principios de la Luz, tema que era de interés para Vennya y que despertó curiosidad en mí, me hizo reflexionar. Mi carácter curioso me hizo indagar en esto y lo que pude extraer de los libros a mi alcance:

¿Dios?

Dios es un ser mencionado en algunas leyendas de Azeroth. En algunas creencias que se dice que ha sido el creador del universo, el Creador. Sus emisarios se dicen ser apóstoles y ángeles. Cielos de Dios y "se implican estar en contradicción con los demonios". Dios es capaz de ver de una manera que abarque a todos. Él ve el mundo con una claridad extrema, y sólo una fracción de la potencia que los simples mortales ciegos.

Dios se dice que fue venerado por los clérigos de Villanorte. Durante la Segunda Guerra, iglesias cantaban himnos a "Den gracias a Dios".

El Caballero de la Mano de Plata llamado Duncan Senturus cree en un poder superior que pueda elegir los caminos para la gente, y creía en que las malas acciones eran castigadas.

Sin embargo, la existencia de ese Dios no es creído por la mayoría de la Iglesia de la Luz Sagrada. Para los miembros más actuales de la Sagrada Luz, no es una religión sino una filosofía. La mayoría de los miembros no van a la iglesia y no creen en ningún otro Dios.

¿Los Dioses?

Sorprendentemente, encontré un escrito sobre un Alto Elfo, Milán, no habla de la creencia en el creador "Dios", sino de un panteón entero llamado "los dioses". Menciona creer en estos dioses, rogandoles y recibiendo ayuda de ellos. Habla de sus creencias hacia estos dioses y ellos respondiendo a sus oraciones.

Sobre Milán, pude encontrar...

Milán de la Casa de los Elfos escribas era un miembro de la Alianza. Se registraron los sucesos de la Segunda Guerra en el lirbo de "Los Anales de la Gran Alianza". Le habían dado el honor supremo de inscribir los Anales en preparación para la inminente invasión de la Horda de orcos. Era la primera vez en la larga historia, que la Gran Alianza de Lordaeron reunió a los humanos, elfos, enanos, gnomos y bajo la misma bandera para eliminar a su enemigo común de la faz del mundo. Cuando empezó en los Anales que no sabía si podría describir la victoria de la Alianza o la derrota, pero era su esperanza de que los descendientes de la Alianza que leyeran y aprendieran de las páginas, independientemente de su resultado. Por esa razón, se concentró en los aspectos militares de los esfuerzos de la Alianza - de modo que los futuros líderes podrían estudiar y ampliar en ellos en el caso de la desaparición de la Alianza. Creía que la preservación de los conocimientos es de suma importancia, ya que la Horda vino a destruir todo lo que había conocía y todo lo que amaba de las tierras. Él prestó solemne juramento de proteger a las palabras con su vida y transmitir los conocimientos a todos los que quisieran creer en su sabiduría.

Su primera acción después de escribir el prólogo de dicho libro fue viajar a Trabalomas para grabar los mapas, órdenes, y las tácticas de los más prometedores Comandantes humanos de la Alianza allí, y que esperaba que los dioses ayudasen en favor de la Alianza. Esta posición le dio la experiencia de primera mano de varias batallas a lo largo de la guerra.

En última instancia, fue testigo de la caída de la Cumbre de Roca Negra y la destrucción del Gran Portal Oscuro, y fue testigo de la semana de celebraciones en todo el mundo.

Especulaciones

Es posible que los clérigos y algunos Caballeros de la Mano de Plata tengan cierta creencia en el fundamento de este "Dios", de uno de los mitos de la creación de Azeroth, así como el conocimiento de los ángeles. Varias referencias señalan que algunos en Azeroth creen que el universo fue creado por "una singular, todopoderosa entidad".

Los "Dioses de Milán" podría incluir todo el panteón de deidades de los Kaldorei.

¿La Luz es como "Dios"?

Varias personas predican que la luz puede tener una sabia voluntad, que puede decidir sobre las cuestiones, la misericordia de subvención, y que incluso se ve afectada. En palabras de Velen, el profeta Draenei, "Que la Luz se apiade de tu alma".

La joven Abbendis Brigitte parece creer que la Luz Sagrada es una especie de entidad sabia como un dios con una voluntad. Ella escribe que lo llama a ella en el libro "Camino de la Redención" y "El Diario de La Alta General Abbendis", diciendo: "Vengan a mí ...". Ella cree que es capaz de tomar nota de los hechos de los creyentes, obras y oraciones. Afirma que la fuerza de su voz tiene la claridad y sentido de propósito.

Sin embargo, la entidad que la llama puede ser algo mucho más siniestra, como ella lo describe en el diario que le ordena abandonar la Cruzada Escarlata a su ruina, un acto que ella cree es deshonrosa. Sin embargo, la Cruzada Escarlata se describe como una organización legal malvado, por lo que la entidad divina puede ser benevolente, después de todo.

Podría ser posible que la creencia de Abbendis "que la Sagrada Luz es un ser sensible" puede ser un enlace a algunas de las creencias iniciales de los Clérigos de Villanorte y algunos de los Caballeros de la Mano de Plata antiguamente.

Algunos de los Draenei también parecen creer que la Luz es sensible.

Algunos habitantes de Azeroth y Draenor se refieren a la muerte como "ir a conocer a tu creador".

Mitos de la Creación

Nadie sabe exactamente cómo empezó el universo y los orígenes exactos de éste permanecen inciertos. Pero varios mitos de creación han sido postulados por los pueblos de Azeroth. Una colección de estos mitos que he podido encontrar...

1. La Teoría del "Big Bang"

Algunos teorizan que una catastrófica explosión cósmica envió a infinitos mundos en la inmensidad de la Gran Oscuridad - mundos que un día tomaron formas de vida. Una diversidad maravillosa y terrible al mismo tiempo.

2. La Teoría de la Creación de Dios

Otros creen que el universo fue creado en conjunto por una sola entidad todopoderosa.

"Dios" se dice que ha sido venerado en Azeroth antes de la guerra por primera vez por los Clérigos de Villanorte y las referencias a Dios o un poder superior se puede encontrar en varios libros.

3. La Teoría de los Titanes

Algunos creen que toda creación es originaria de estos seres, a los que llaman Titanes.

Los Titanes, dioses colosales de piel metálica de los lejanos confines del cosmos, exploraron el universo recién nacido y se pusieron a trabajar en los mundos que se encontraban. Dotaron a los mundos levantando grandes montañas y excavando profundos océanos. Todo era parte de su plan, con visión de futuro, para crear orden en el "Caos". Incluso dar poder a razas primitivas para cuidar a sus obras y mantener la integridad de sus respectivos mundos.

Nota: Encontrar más información sobre "El misterio de los creadores"

4. Teoría de los Dioses Antiguos

Los miembros del Martillo Crepuscular creen que los dioses antiguos fueron los creadores del mundo y que los titanes fueron los forjadores de corrupción. Los que arruinaron el mundo de su forma original.

Nota: Encontrar más información sobre "Los Dioses Antiguos"

5. Origen de los Elfos Nocturnos

¿Nuestra descendencia como posteriores Altos Elfos y Elfos de Sangre?

Se dice que los antiguos Kaldorei con cautela se dirigieron a las orillas del Pozo de la Eternidad. Mostraron interés por las extrañas energías del Pozo, construyeron casas primitivas en sus tranquilas costas. Con el tiempo, el poder cósmico del Pozo les afectó, haciendoles más fuertes, sabios y virtualmente inmortales. La tribu adoptó entonces el nombre Kaldorei, que significa "hijos de las estrellas" en su lengua materna. Los Kaldorei, o elfos de la noche, así sería conocido más adelante, adoraban a la diosa de la luna Elune y creían que ella dormía en las brillantes profundidades del Pozo durante las horas diurnas.

Algunos textos antiguos hablan de que se trataba de una pequeña facción de trolls que se separó del Imperio Amani y fundaron su propia colonia en el corazón del continente negro. Se dice que estos valiosos pioneros descubrieron el cósmico Pozo de la Eternidad, que los transformó en seres de inmenso poder. Algunas leyendas sugieren que estos trolls aventureros eran los elfos de la noche en primer lugar, aunque esta teoría nunca se ha probado.

6. Origen Centauros

Según algunas leyendas, los centauros son los hijos de Zaetar, uno de los hijos de Cenarius.

En otras leyendas, transmitidas por elfos de la noche, el centauro original fue uno de los primeros tres hijos de Cenarius.

7. Mitos Tauren

No he encontrado referencias, debo buscarlo...

  • Me Gusta 1
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Pensamientos y Filosofía

Pensamientos: ¿Confianza, Amor o Ilusión?

Otra vez, reflexiones tras conversar con Rayan la otra noche, algo que empieza a ser bastante rutinario, adoro charlar con él, para que negarlo. Hay pocas personas con las que mantener conversaciones interesantes en esta ciudad. Supongo que el hecho de descubrir quién era ha influido y el que compartimos un patrón similar tras la destrucción que la plaga ocasionó en nuestro hogar. Me gustaría saber más sobre sus motivos, pero a mí tampoco me gusta mucho recordar, quizá con el tiempo logre saber, ¿Por qué Alathen Sunlake se convirtió en Rayan Dawnfire? No creo que pueda preguntarle ahora, pero, ¿puede ser alguien en quien confiarle? Y es que no puedo evitarlo, lo idolatro. Creo que también le caigo bien, cuando charlamos se ve distinto, más relajado, distendido, ¿cómodo? Espero que sí, pues es agradable tener con quién poder mostrar mis pensamientos, por la razón que sea, entiende mis ideas, aunque haya veces que ni yo misma sepa aclararlas con exactitud, pero él es paciente, no burla de lo que digo, eso es lo agradable.

Le agrada tanto como a mí el razonamiento. La noche pasada le mostré mis escritos. Algo que no suelo hacer... la última vez que le mostré a Eliyion mis teorías sobre el amor, se rio de mí, ¡Odio eso! Puede o no compartir la opinión, pero no me debate. Eliyion es una buena persona, la verdad es que, podría llegar a ser un ¿amigo? No hay malicia en él y podría decir que es leal.

Bueno tras mostrarle mis escritos a Rayan, sobre mi recopilación de la existencialidad, estuvimos largo rato charlando sobre eso, volví a casa con muchas reflexiones en mi cabeza. Lo que llamo "reflexiones filosóficas".

Creo que suelo pensar en ello desde que Dhalassir me habló de "buscar nuestra verdad", me es inevitable hacerme tantas preguntas sobre ello.

También pensé mucho en ello tras conocer a Caledhris, ¡un elfo canalla e irritable! La misma noche que regresaba de mi charla existencial con Rayan, le encontré en la taberna junto a Meneldor.

redyan04.jpg

Caledhris y Redyan

Caledhris es el típico que no entendería sobre mis ideas, nimiedades, pensamientos... ¡Es un sinvergüenza oportunista! Amante del materialismo. No veo otra verdad en él...

El problema... sí, hay uno... y este surgió cuando tras hablar con él y Meneldor, apareció de nuevo el paradójico tema del amor. Meneldor arrojó un poco de claridad, aunque ahora dudo de mí misma. Si algo he podido comprobar es que cada persona reacciona de modo distinto en los síntomas del amor, depende del carácter de cada uno y su forma de ser. Siendo así es tan desconcertante y variado... Meneldor aseguró ser solamente una atracción hacia otra persona, de forma especial, gustas de su forma de ser, gustas de compartir con dicha persona, gustos similares, ¿atracción? Sólo pudo venirme alguien a la cabeza, de forma instantánea... ¿Rayan? Adoro su forma de ser, incluso lo que no dice, el misterio tras su persona, gusto de compartir el conocimiento y como más descubro de él, más y más interés tengo, vuelta un día tras otro ¿para verle? ¿Solo me interesa saber o es más que eso? De repente dudo de mí misma, sin darme cuenta ¿me ha ocurrido? ¿Tan inevitable es? Y ahora no sé cómo reaccionar, de repente me avergüenza, ¿a eso se refería Eyrille cuando dijo que un día me daría cuenta al sucederme? Ahora no sé si volver a ir a verle ¿o es auto-negación para no reconocerlo? No lo sé, dudas y más dudas...

Salí de la taberna con una sensación embarazosa. Me he sentado frente a la ventana y aquí estoy escribiendo sobre tantos y tantos pensamientos en mi cabeza, reflexiones que saltan de un tema a otro y es que me pregunto...

Filosofía: ¿Verdad o Nimiedades?

¿A dónde vamos? ¿Hacia dónde nos dirigimos? ¿Se hacia dónde voy? ¿Qué sentido tiene la vida? ¿Cuál es mi verdad?. Son algunas de las preguntas incómodas que nos hacemos todos. Desde los tiempos inmemoriales han habido grandes filósofos, pensadores religiosos, que se han hecho estas preguntas. Obviamente toda persona que piense un poquito se ve obligada a hacerse una filosofía aunque no sea un filósofo, es inevitable preguntarse ante todos los misterios, contradicciones y paradojas de nuestra existencia.

Cuando los pensamientos del "Positivismo", cuando la filosofía del "Optimismo", del "Existencialismo" se desmoronan, cuando ya no sabemos a qué círculo girar, cuando la mente se nubla al pensar la realidad de la muerte, cuando ya te das cuenta que todas las ideas y mitos de las diferentes culturas de Azeroth puedan ser en cierto modo inciertas solo para tratar de calmar el vacío existencial, es ahí cuando no puedes soportar las preguntas incómodas y desesperantes sobre la existencia.

¿Y qué hay de la vanidad? Vanidad de vanidades, todo es vanidad. (Vanidad significa vacío, nada). La vanidad, es el orgullo basado en cosas vanas. Cosa vana es todo aquello que se tiene por valioso pero que en realidad desvía nuestra atención de lo que en verdad vale. Lo vano nos apega a una falsa imagen de las personas, medido por sus riquezas, fama, poder e intelectualismo. La vanidad podría traducirse también como un deseo de calmar la crisis existencial, de querer saber quiénes somos, para que servimos, ¿si alguien nos ama o si amamos a alguien? Entonces la forma de calmar nuestro sentimiento es engañar al alma, con cosas materiales, búsqueda de idealismos, admiración de la gente, auto exaltación de nuestra personalidad, todo para engañarnos a nosotros mismos para no sentirse solo en el universo y sentir que tenemos importancia. Quizá ese pensamiento me ha llevado tantas veces a mostrarme como lo hago, ¿intentando disfrutar de las nimiedades? Aquello valioso, no material, puede otorgar felicidad desconocida para muchos.

La falta de esas "nimiedades" es lo que lleva a otro de los grandes problemas, la filosofía de buscar riquezas perecederas y esperar en ellas. Nos cegamos por el materialismo creyendo que evitará la muerte afanándose en acumular bienes materiales. Obviamente esto puede parecer razonable superficialmente por un poco de tiempo, pero en esencia no es así. Porque ni dinero ni las cosas materiales nos pueden hacer felices y cuanto más se tiene, más se quiere porque nuestros deseos corruptos nunca se sacian, ¿así somos?

¿Y la búsqueda de la verdad? Si la filosofía es la búsqueda, por las causas primarias de todo lo que existe. Las personas desde tiempos inmemoriales han tratado de resolver el dilema de la existencia y propósito de la vida descansando en sus propios esfuerzos. Realmente esto ha sido un ejercicio sutil, ilusorio y frustrante, puesto que nunca se ha llegado a conocer la verdad por medios propios. Por lo tanto la filosofía es un sistema que depende de un racionalismo nuestro. ¿Es posible descubrir las verdades fundamentales y definitivas de la vida? ¿Solamente los "Dioses" pueden hacer eso? Entonces no es sorprendente leer libros de muchos autores, los cuales no mencionan creencia en "todopoderosos" o "Dioses". Muchos toman la fantasía, mezclando esas variadas o inventadas teorías.

Un círculo que no parece dejar de girar, ¿es en vano buscar ese saber? Después de todo, siempre necesitamos respuestas para todo. Trato de reflexionar entorno a ello, pero ¿existe solo una verdad? Quizá realmente... haya más de una. Me es inevitable por mi mente soñadora, amante del conocimiento, a pesar de ello, enfatizo en esas nimiedades, creo que es más certero que caer en el materialismo, pero sé, es difícil creer en las cosas que no podemos ver, tocar... nimiedades de la vida.

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios
  • 1 mes atrás...

Estudios: Líneas Ley

Arcanomicon.jpg.7de838befb946fd600d1ebaa

Últimamente estoy algo preocupada respecto a mi dificultad para realizar hechizos correctamente, no puede ser que me resulte tan sumamente complicado ¿porque? ¿es fallo mío? ¿en qué me equivoco? Tras esta preocupación me tomé varias horas en la biblioteca para recopilar información, la posible, de forma esquemática, realizando así un trabajo de estudio sobre las Líneas Ley.

  1. ¿Qué són?
  2. Líneas Ley en Azeroth
    • Reinos del Este
    • Kalimdor
    • Rasganorte

[*]Líneas Ley en otros lugares (Terrallende)

[*]Los Patrones-Runa Ley

[*]Arcanomicon

[*]Localización y Estudio Patrones-Runa Ley

--------------------------------

1. ¿Qué Són?

Las Líneas Ley son grandes líneas de poder que se conocen por ese nombre y se entrecruzan por las tierras de Azeroth. Estas líneas magicas son a menudo aprovechadas para todo tipo de fines poderosos, desde la creación de pozos lunares, la poderosa cúpula resplandeciente de Dalaran y para realizar cualquier hechizo, como por ejemplo los portales usados por los magos. Las Líneas Ley existen por todo Azeroth y son la fuente de magia Arcana más profunda y pura.

Las Líneas Ley recorren todo el mundo - son los patrones de energía mágica que otorgan de vitalidad todo Azeroth a través de éstas, al igual que los vasos sanguíneos en una criatura. Estas líneas de energía son reconocidas sutilmente por todas las culturas. Las Razas de Azeroth las identifican como los lugares sagrados de la Luz, emplazamientos para los pozos lunares, lugares donde el poder de la muerte ha afectado el flujo de energía, y los parajes naturales llenos de fuerza elemental que son sagrados para los chamanes.

La mayoría de las culturas, sin embargo, solo se centran en aquellos lugares donde las líneas convergen y se encuentran, intentando conseguir el máximo poder de éstas. Los que tratan de comprender y dominar el poder rúnico. Entender que las convergencias no son las únicas partes importantes de ese poder - los patrones formados por las líneas propias son importantes también. Estos patrones, que se asemejan a las letras de un alfabeto extraño, son llamados runas.

Hay líneas de poder que atraviesan la tierra en unas pocas áreas de selección, pero éstas no son las únicas líneas - simplemente las más obvias. Dentro de estas cuerdas gruesas y con flujo de poder, también hay líneas pequeñas y delgadas que se entrelazan creando una basta red de fluyente, la energía sutil.

Los que tienen un gran poder mágico y Caminantes ley encuentran esos sitios.

Una comunidad que se entrelaza encima de una convergencia de dos o más líneas de energía mágica se le llama un "Nexo de Línea Ley".

2. Líneas Ley en Azeroth

Se cree que todas las Líneas Ley de Azeroth recaen en un lugar de Karazhan y esa fue la fuente de gran parte de los poderes de Medivh.

Reinos del Este

  • Líneas Ley de Tierras Fantasma son utilizadas en
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    para espiar Lunargenta.
  • También parece haber una Línea Ley en los Bosques de Canción Eterna, que da a los tres santuarios su poder. Este Nexo-Ley también es mencionado en conexión con la Fuente del Sol.
  • Un patrón de Línea Ley existe en las montañas que rodean la Ciudad de Ventormenta, que hace que haya grandes vientos en la ciudad, de ahí recibió su nombre. El patrón runa derivados de esta Línea Ley permite a los hechiceros predecir el tiempo hasta un día antes.
  • En Cumbre de Roca Negra se encuentra la Línea Ley del patrón de "Fortaleza". El patrón runa derivado de ésta Línea Ley aumenta la habilidad marcial de los hechiceros.
  • El patrón de la Línea Ley de la "Llama" se encuentra en lo profundo del
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    en las Montañas Crestagrana. Las runas que usan este patrón son utilizadas por los hechiceros para aumentar la resistencia al fuego.
  • Un patrón de Línea Ley que constituye la base para el "movimiento y/o agilidad" se puede encontrar en una serie de cañones en Tierras Inhóspitas, en la que toda clase de criaturas de movimiento rápido se pueden encontrar. Los que se mueven rápidamente dentro de ésta área encontrarán su movimiento aumentado inexplicablemente. Los hechiceros que usan el patrón de runa derivados de ésta Línea Ley serán capaces de aumentar su velocidad.
  • Una Línea Ley latente fluye por debajo de
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    .
  • Los
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    , cerca de Grim Batol, son la ubicación de la Línea Ley patrón de "Protección". El patrón procedente de las runas de ésta Línea Ley permiten que los hechiceros puedan generar barreras de protección a su alrededor.
  • En la Isla de Quel'Danas hay al menos una Línea Ley, que parece ser la fuente de alimentación de los portales, donde se aprecia el poder de una estatua Naga.

Kalimdor

  • En Sierra Espolón hay dos patrones conocidos de Líneas Ley.
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    es la ubicación del patrón de la "Concentración". El patrón de runa que se deriva de la Línea Ley "Concentración" amplía los sentidos de los hechiceros. Otro patrón de Línea Ley que se puede encontrar en el
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    , se conoce como el patrón de "Piedra". El patrón runa derivados de la Línea Ley "Piedra" se puede utilizar para aumentar la resistencia de los hechiceros.
  • El patrón de la Línea Ley de la "Bestia" se puede encontrar en el
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    en Vallefresno. El patrón runa derivado de la Línea Ley es la fuente de todos los hechizos "Marca de la Bestia".
  • Cerca de las llanuras barridas por el viento en Mulgore, hay una serie de
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    que originan por medio de las Líneas Ley el patrón de "Cicatrización". El patrón runa derivado de estas Líneas Ley duplica la tasa de curación natural de los hechizos de sanación.
  • El patrón de la Línea Ley de la "Restauración" se puede encontrar en el Claro de la Luna en el
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    . El patrón runa derivado de ésta Línea Ley aumenta la resistencia a los venenos y enfermedades como también es capaz de sanar las heridas en el doble de tiempo habitual.
  • Los Tauren crearon un campamento al sur de
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    , construído sobre antiguas Líneas Ley en la Sierra Espolón. Es tal vez debido a estas Líneas Ley que los elementales son atraídos al área alrededor del Valle carbonizado.

Rasganorte

  • El patrón de la Línea Ley del "Hielo", se encuentra en Rasganorte, en un valle de un frío terrible, mordaz, que se dice que es la fuente de todo frío en Azeroth. El patrón de esta runa otorgado por la energía de su Línea Ley otorga aumento de resistencia al frío.
  • El patrón del clima frío se encuentra en el
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    , pero ha menguado después de que Hodir fuese llevado.
  • También en Colinas Pardas hay un patrón por donde cruza una Línea Ley hasta
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    .
  • También hay una Línea Ley en el
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    , donde Malygos está utilizando
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    para canalizar toda la energía de las Líneas Ley de Azeroth y llevarlas al Vacío. Algunas Líneas Ley en Rasganorte se redirigieron por el Vuelo Azul hacia
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    . Una de esas líneas fluía a través de los
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    .

3. Líneas Ley en otros lugares

Al igual que las Líneas Ley de Azeroth conducen a un lugar en Karazhan, la mayoría de Líneas Ley de Terrallende conducen en puntos cercanos del Templo Oscuro. (Es toda la documentación que encontré respecto a ello).

4. Los Patrones-Runa Ley

1. Patrón "Tiempo":
El patrón runa derivados de esta Línea Ley permite a los hechiceros predecir el tiempo hasta un día antes.

2. Patrón "Fortaleza":
El patrón runa derivado de ésta Línea Ley aumenta la habilidad marcial de los hechiceros.

3. Patrón "Llama":
Las runas que usan este patrón son utilizadas por los hechiceros para aumentar la resistencia al fuego.

4. Patrón "Movimiento y/o Agilidad":
Los hechiceros que usan el patrón de runa derivados de ésta Línea Ley serán capaces de aumentar su velocidad y/o controlarla.

5. Patrón "Protección":
El patrón procedente de las runas de ésta Línea Ley permiten que los hechiceros puedan generar barreras de protección a su alrededor.

6. Patrón "Concentración":
El patrón de runa que se deriva de la Línea Ley "Concentración" amplía los sentidos de los hechiceros.

7. Patrón "Piedra":
El patrón runa derivados de la Línea Ley "Piedra" se puede utilizar para aumentar la resistencia de los hechiceros.

8. Patrón "Bestia":
El patrón runa derivado de la Línea Ley es la fuente de todos los hechizos "Marca de la Bestia", utilizado por los Druidad y su conexión con el mundo y los animales.

9. Patrón "Cicatrización":
El patrón runa derivado de estas Líneas Ley duplica la tasa de curación natural de los hechizos de sanación.

10. Patrón "Restauración":
El patrón runa derivado de ésta Línea Ley aumenta la resistencia a los venenos y enfermedades como también es capaz de sanar las heridas en el doble de tiempo habitual.

11. Patrón "Hielo":
El patrón de esta runa otorgado por la energía de su Línea Ley otorga aumento de resistencia al frío.

12. Patrón "Clima frío":
El patrón del clima frío se encuentra en el Templo del Invierno, pero ha menguado después de que Hodir fuese llevado. Se desconoce más sobre el mismo pero se prevee que es el propio nacimiento del Invierno y el punto más helado de todo Azeroth.

13. También en Colinas Pardas hay un patrón por donde cruza una Línea Ley hasta Eastwind Shore pero no se ha estudiado su nombre o propiedades.

Los

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
utilizan estos Patrones para tatuar su cuerpo y obtener mezcla de beneficios de dichas propiedades.

5. Arcanomicon

El Arcanomicon es el mapa de todos los trazados y las intersecciones de las Líneas Ley en el mundo de Azeroth. Fue otorgado a Malygos hace siglos por el titán Norgannon. El Arcanomicón ha sido continuamente actualizado y revisado por los dragones del vuelo azul durante los largos años de reclusión de Malygos. Malygos planeaba usar el Arcanomicon para localizar y desviar las Líneas Ley hacia su base de operaciones en Rasganorte, El Nexo.

Arcanomicon.jpg.7de838befb946fd600d1ebaa

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Relatos: El Libro del Dragón Azul I

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

Redyan había ido a recoger el libro, pidiéndole al sirviente de la casa Dawnfire, si podía darselo. Se lo había dejado allí tras salir a toda prisa, después de que se diera la evidéncia de lo que sentía la joven elfa por el mago. Cuando eso ocurrió, salió escopeteada de allí, apenas sabía como reaccionar y sabía que todo iba a cambiar desde ese momento...

Regresó con el libro a la taberna, donde le esperaba Caledhris. Ella le había hablado sobre aquel misterioso libro que el espíritu dragón le dio a custodiar, durante el viaje a Izal-Shurah. Mientras lo ojeaba explicando al mismo tiempo se percató de que Rayan había traducido parte del prólogo y en las primeras páginas de este había la ilustración del Autor, la conjetura de que se pudiera tratar del denominado "hechicero Khyrial". Vio que bajo el título había unos textos en lenguaje Arcano, lo más similar a un hechizo, pero no parecía tener mucho sentido. Sin esperar gran cosa, leyó el texto en voz alta... el libro comenzó a desprender una luz azulada, deshaciendo el sello y la historia empezó, viéndose de repente en otro lugar.

Ambos se sorprendieron de lo ocurrido, no era para nada lo que esperaban, aunque Redyan estaba fascinada por ello. La historia comenzó, poco pudieron averiguar sobre ella, salvo el encuentro con un joven guerrero, con una fuerza increíble, el cual les explicó brevemente que se trataba de uno de los guerreros del Dragón Azul, este parecía la entidad de adoración en aquel misterioso mundo.

No duró mucho, pues tras escapar de unos hombres que perseguían al joven, el cual nunca dio a conocer su nombre, pues apenas el tiempo les dio para ello. Llegaron a una especie de santuario donde sus paredes mostraban grabados sobre el dragón, sus guerreros y la invocación, como si de una vieja leyenda dentro de otra, se tratase.

Una voz en eco les llamó la atención, resonaba alrededor de las paredes del santuario. Redyan la reconoció de inmediato. Rayan había recogido el libro de la posada y lo había llevado a su casa, mientras leía las páginas que le mostraban lo que estaba ocurriendo con ellos en el interior. Quizá fuera la misma atención que puso la joven Redyan en esa voz o el deseo en ese instante, de salir para verle. Despues de todo no era de extrañar ya eran evidentes sus sentimientos por Dawnfire.

Una vez salieron de allí, Caledhris se despidió, casi escaqueándose de la situación. Redyan tuvo que escuchar los reproches del gran mago, al haber usado el libro sin un poco de precaución. Redyan se enfurecía, cada vez que la hablaba así, odiaba que la tratase cual niña pequeña o así lo veía ella. En su ingenuidad no sabía darse cuenta de que era preocupación del mago, una preocupación que él sabía bien era inusual en su forma de ser, pero ninguno parecía querer dar el brazo a torcer y reconocer lo evidente.

Redyan se marchó nuevamente con el libro, tenía toda intención de volver a usarlo. Aquél libro atraía su curiosidad de forma obsesiva, no podía evitarlo.

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Estudios: ¿Error de cálculos Ley?

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

Hacía semanas que le había sido encomendada una tarea, aparentemente simple, ejercicios del cálculo de las líneas ley que recorrían Bosque Cancion Eterna. Redyan tomó con entusiasmo ese estudio y se puso a recopilar información al respecto para conocer con mejor detalle el análisis que iba a realizar.

Lo que parecía sencillo comenzó a tornarse en una agonía, entre los delicados momentos personales que la joven pasaba, su dificultad por conjurar cualquier hechizo de lo más básico, solo le faltaba que tras intentar realizar los analisis de las coordenadas Ley en la zona, un impedimiento mayor se postrase en el camino de la tarea.

En cada una de las ocaciones que había intentado llevar a cabo el analisis, llevando el aparato que le proporcionaron en la Academia Ocaso Marchito, aparecieron unos extraños individuos. ¿Coincidencia?

Al principio solo pudo pensar que tal vez algun alumno pudiese intentar boicotear su estudio, pero poco a poco esa idea fue perdiendo peso, pues dificil sería que nadie con la maestría de aquel extraño tipo encapuchado, por el arte magico, le pudiese interesar trabar los estudios de una principiante.

Tras la dificultad que supuso enfrentar los ataques de esos extraños, que lograron vencer con la ayuda de un misterioso enmascarado, logró obtener las muetras de las coordenadas. Tomó nota de ello y se dispuso a calcular.

Repitió los calculos una y otra vez, en cada una de esas, estos no coincidían con los resultados que el libro de ejercicios presentaba. Ya rendida de repetir el cálculo, fue a hablar con su mentor en la Academia Ocaso Marchito. Éste reprochó a Redyan, sus cálculos, alegando que algo debía estar haciendo mal, no podían haber cambiado. La instó a realizar el análisis nuevamente con algun compañero que pudiese ayudarla.

Eso hirió completamente el orgullo de Redyan, pero no tuvo mas remedio que obedecer, así que decidió pedir ayuda a Círyon, pues dentro de los pocos conocidos que tenía en la Academia Ocaso Marchito, parecía no tener tantas dificultades con la magia.

Le comentó al joven aprendiz sobre el estudio y éste asintió a la propuesta, parecía igualmente interesado. Ambos se dirigieron al primer punto del ejercicio, para tomar los datos de analisis con un nuevo aparato proporcionado por la Academia Ocaso Marchito.

Una vez allí, mientras realizaban el analisis, los ataques volvieron, esta vez apareciendo el encapuchado con unos extraños perros, los cuales parecía controlar. Los jovenes aprendices, trataron de defenderse como pudieron. Círyon resultó bastante herido y Redyan tuvo que encararse con el hechicero, pero nuevamente su dificultad por conjurar le impedía siquiera defenderse a sí misma o a su compañero. Apareció el enmascarado, el cual otra vez, alejó al hechicero.

Mientras Redyan llevaba a Círyon para que fuese atendido, el enmascarado curiosamente, parecía estar interesado en los cálculos del mismo analisis. Cuando Redyan regresó para buscar el aparato, éste seguía allí observando los numéricos. Confirmó a la joven, que no estaban equivocados. Su sorpresa mayormente no fue descubrir que no era un error suyo de cálculos, sino quién se ocultaba tras esa máscara. Pocas horas antes, había discutido con él... Rayan Dawnfire.

Volvió con Círyon, dejando encima la mesa, el aparato de analisis y allí se vino abajo... demasiadas cosas habían pasado. Con el orgullo herido, la inutilidad que sentía y los problemas personales, deseó con tantas fuerzas desaparecer, que se hizo realidad... en un abrir y cerrar de ojos, el libro que había recogido en la Isla de Izal-Shurah, se la tragó, como si de una ilusión se tratase.

Círyon se quedó estupefacto, sin comprender al principio, que había pasado. Tras intentar varias manipulaciones mágicas hacia el libro, sin resultado alguno, se dirigió a la Academia Ocaso Marchito, esperando que pudieran darle alguna respuesta y de paso, informar de que el primer analisis, era verdaderamente distino a los cálculos que mostraba el libro de ejercicios.

Con la desaparición de Redyan, el estudio quedó momentáneamente parado y Círyon centro atención en descubrir como poder hacer volver a la joven elfa, del interior de ese libro.

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Relatos: El Libro del Dragón Azul II

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

Redyan había entrado en el interior del libro una vez más, pero esta vez encerrada por sus propios temores. Pero el libro aguardaba oscuros propósitos. Lo que parecía un cuento lleno de misterios y conocimiento, cada vez indicaba más un alto peligro y corrupción...

Se encontraba en un páramo helado, una pequeña villa, donde supo que aquel chico que ayudó a escapar la primera vez, se trataba ni más ni menos que de otro guardián del libro, llamado Altaniar, pero... ¿entonces porque le perseguían? Pudo averiguar en la villa más al respecto, los aldeanos ahora detestaban la propia leyenda y parecía haber una guerra a punto de estallar entre el reino nordeño y el sureño de aquel mundo.

Caledhris, de nuevo, había llegado al libro junto a ella, aunque en el bando contrario. Mientras ella permanecía oculta en la villa nordeña, un grupo de espías del ejército sureño se encontraban con Caledhris y no lograron verse hasta que ese grupo fue interceptado por algunos guardias.

Por más que el joven elfo intentaba convencer a Redyan de volver, más tozuda se volvía ella, contra esa idea. Estaba cercionada de destramar los misterios que aguardaba ese libro, a pesar de las advertencias de uno de los guardianes del dragón, Altaniar, quién le dijo que debía ir contra la voluntad del libro o encontraría la muerte al final...

Encontrar la muerte afuera o dentro no parecía ser un dilema para ella en esos momentos, en los que no era temor a perder la suya, lo que tenía. Metió en su cabeza la absurda idea de seguir con la leyenda del libro, si ese dragón era tan poderoso como decían, quizá podría otorgarle poder a ella, poder suficiente para protegerse de lo que más miedo le daba, perder a quién más quería. Esa idea le obsesionaba por encima de cualquier otra cosa y no era algo que estaba dispuesta a renunciar, así fue que tomó la decisión de proseguir camino para encontrar al siguiente guardián del libro. Gracias a la información de unos aldeanos de la villa nordeña, consiguió saber que en las montañas al noreste, se había visto uno de ellos hacía un año, mucho tiempo, pero nada perdían por ir, no había más pistas.

Con Caledhris acompañándola, sin estar nada convencido de lo que se proponían, aun así no pensaba quedarse solo en la villa y menos dejarla ir sola por esos páramos helados. Tomaron un camino montañoso, abriendose paso entre altos senderos hasta dar con una extraña mansión, asentada en una colina... con la noche al caer y el cansancio de la travesía, optaron por entrar, esperando que el dueño de ésta, fuera alguien minimamente amable y les ofreciese cobijo. Pero al entrar, la oscuridad, polvo y silencio, daba por entender, que aquel caserón había sido olvidado hacía ya mucho.

Una percepción erronea, pero tardía, en cuanto en mitad de la oscuridad, las voces empezaron a emitirse en la gran sala principal. No podían localizar su procedencia, parecían estar en todas partes, hasta que una pequeña niña, ni humana, ni elfa, siquiera sabrían decir de que raza podría tratarse, pues todo en aquel mundo era desconocido. Ésta les miraba con sus grandes y alilados ojos, sonriendo traviesa, pero con inocencia en su rostro. No parecía peligrosa... aunque sus palabras, fueron más claves de lo esperado, cuando de sus labios comenzó a hablar sobre el Oráculo, como si se tratase de alguien realmente importante en el equilibrio de ese mundo, deseaba hablar con Redyan sobre sus planes allí. Aquello llamó la curiosidad de la joven elfa, más de lo que podía imaginar así que siguió a la chiquilla hasta una sala bajo los cimientos de la mansión, donde a los pocos pasos, pudo darse cuenta de que la gran casa había sido levantada para ocultar un misterioso templo.

Al final de la sala, había una especie de altar y un trono, donde una silueta encapuchada, la esperaba. Imaginó que debía tratarse del Oráculo, que la niña había mencionado. Mientras ella hablaba con el Oráculo, Caledhris permaneció con la chiquilla, esperando. El Oráculo le hizo saber a Redyan que ahora el libro estaba bajo corrupción, que el equilibrio del mundo en su interior, había sido quebrado por otra fuerza. Trató igual que el misterioso guardián, convencerla de que dejase su propósito y que lo mejor era que destruyese aquél libro de una vez por todas, nada bueno le traería. Redyan, en su curiosa forma de ser, no podía abandonar esa idea con tanta facilidad, sin al menos tratar de entender que era lo que sucedía entorno a ese mundo, supo que antaño alguien había entrado, antes que ella y que aquel dragón le había concedido el poder que deseaba. ¿Entonces porque no podía hacer eso mismo ella?

No tardaría en caer bajo el influjo que había corrompido ese libro. Regresó con Caledhris, explicándole, lo que el Oráculo le había dicho, aunque fue sorprendida por la revelación de su compañero, cuando le contó que la propia niña le sonrió inocentemente, diciéndole, que la verdadera Oráculo, era ella misma. Así que la silueta encapuchada, no era más que una portavoz, cual escolta y guardiana para ella.

Con la advertencia en sus conciencias, no fue suficiente para evitar que el dragón se presenciase ante ellos. Hablando con retóricas, misterio y confusión, logró que Redyan escuchase sus palabras, llenas de mentiras. Dominando la voluntad de Caledhris, la joven elfa, detuvo, escuchándole, con atención.

"Reúne a los guardianes, invoca al dragón y te otorgaré aquello que deseas, es un trato justo"

Redyan, seducida por su tentadora proposición, realizó un pacto con éste, quién de antemano, se había presentado como Khyrial, el propio autor del libro, pero no fue más que una mentira añadida a su discurso, pues se trataba del propio dragón, que preso en el libro, por el verdadero autor de éste, pretendía utilizar a la ingenua elfa para salir de allí. Redyan creyendo que el pacto realizado era nada más que proporcionar su ayuda a ese misterioso individuo, a cambio de lo que más deseaba, no dio cuenta de que la propia retórica de las palabras, adrede, en el trato, acababa de caer enteramente en la trampa, acordando con éste que si no lo ayudaba, él se quedaría con lo que más preciaba Redyan... la vida de Rayan.

Logró salir del libro, con el aspecto pálido, aun incrédula de lo que acababa de hacer... y notando una peligrosa peculiaridad en sus brazos, unas amenazantes escamas que cubrían parte de sus antebrazos, recordandole su fatal error.

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias III

Bahía del Botín ¿Ciudad de perdedores, borrachos o oportunistas?

Estúpido viaje a Bahía del Botín... lo cierto es que me da bastante asco este lugar, lleno de humanos. Debería haberle dado esas bombas a Asor y que se apañase él solito, siempre me pasa igual, vino tan apurado que caí como tonta en ayudarle a conseguirlas, aunque reconozco que su mención sobre ese Nigromante, Ragnos, me llamó la atención... No es mucho lo que supe de él en este viaje, pero lo suficiente para acabar siendo un personaje de resonancia para mí en los meses posteriores...

Me habían engatusado con la idea de que podría encontrar cosas relacionadas con la magia, eso dijo Izanguere... idiota de mí, lo único a lo que se dedicaba era a vaguear por la Bahía del Botín, emborracharse, lamentarse porque la zopenca de su ex-mujer le había dejado por otro y éste sofocaba su patética decepción llevándose a apestosas humanas a su habitación. Ya intentó alguna vez engatusarme para que fuera yo... éste debe pensar que soy tonta, pecaré con cosas pero en eso, chico... NO. Me hacía la tonta en todo caso y desviaba el tema, después de todo tampoco le mentía, para mí solo había una persona a quién yo quisiera y no sentía necesidad de acostarme con nadie, menos con alguien así. La verdad, si yo hubiera sido su mujer, también le habría dejado, aunque me de algo de pena el chico.

Mientras toda la llamada "Osadía", la tripulación del barco del auto-proclamado "Capitán" Izanguere, perdía el tiempo gastandose el dinero en alcohol y mujeres, aproveché para inspeccionar algunas ruinas de la jungla. Si bien no fue gran cosa lo que conseguí, fue suficiente para llamarme la atención a indagar en estudios posteriores. Encontré una curiosa tablilla de origen Troll y por una cantidad, considerable, todo hay que decirlo, conseguí que una Troll de la ciudad portuaria, me dijera el origen de ésta. Por lo que pude saber, se trataba de una tablilla de la tribu Zandalar. Anoté el nombre de la tribu para realizar investigaciones más adelante, pues la Troll en su breve explicación me había comentado que practicaban magia y en ocasiones el arte del Ilusionismo. Por alguna razón que realmente no sabía explicar, la Escuela de Magia de la Ilusión* causaba un gran interés en mí.

Nazamur...

"¡Se llama Hollín!" ... No estúpida humana, no se llama Hollín, se llama Nazamur. Ese era el nombre que yo le había puesto a ese curioso animal. Parecía una especie de felino, pero nunca vi uno igual, tenía el pelaje oscuro y dos colmillos, cual sable, sobresalían por la comisura de su boca.

Nazamur me seguía a todas partes desde que salí del libro después de cometer el fatídico error, el trato con el dragón...

Al principio pensé que ese felino podía ser el mismo dragón transformado en esa especie de animal, pero poco a poco esa idea fue perdiendo peso. El animal no tenía malas intenciones, lo curioso es que tan pronto estaba ahí como desaparecía y volvía a verle estuviese donde estuviese yo... Me siguió de nuevo a Bahía del Botín, apareciendo por la ciudad portuaria e igual me acompañó a la única "aventura" que realizamos junto a la tripulación de la Osadía. No fue nada del otro mundo, realmente... viajamos hasta una isla perdida de por ahí, desolada... siquiera me interesé en saber cual, pues allí no había nada, nada de mi interés. Dinero para ellos y yo de eso ya tenía más que sobrada, tras el viaje a Izal-Shurah. ¿Que habría sido de Ithalos? Algunas veces me lo preguntaba aun, pero tampoco me quitaba el sueño.

De todo aquel viaje solo saqué algo bueno y es que pude probar con eficacia mi "Tirachinas Arcano"*. Un invento que a raíz de mi dificultad por la conjuración de hechizos, me permitió utilizar mis conocimientos de Encantamiento y dotar de poder las canicas que disparaba y dirigía con el artefacto, canalizando energía Arcana de las Líneas Ley.

Nazamur fue testigo del buen funcionamiento de mi artefacto, pues a diferencia de otras veces, ésta vez no tuvo que ayudarme ni defenderme durante el viaje con la Osadía.

Siguió permaneciendo a mi lado durante la prolongada y aburrida estancia en Bahía del Botín. Las dudas sobre lo que Nazamur era, me fueron resueltas en los días venideros... aunque no fue lo único que descubrí...

------------------------

*1 - Redyan se interesa especialmente en la Escuela de Magia - Ilusión, como estudio principal.

*2 - Tirachinas Arcano, es una de sus invenciones utilizando sus conocimientos con la Profesión de Encantamiento (No confundir con la Escuela de Magia).

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias IV Oscura descendencia...

Es peor el remedio que la enfermedad...

Los dichos existen por algo, a alguién le tuvo que pasar algo bien jodido para inventar éste "Es peor el remedio que la enfermedad" ... y razón tendría.

Después de pasar semanas por Bahía del Botín, harta de no hacer nada productivo, tras tantas promesas falsas del Capitanucho de la Osadía, Izanguere. Éste ahora estaba ocupado con su mujercita, que al parecer rondaba por la ciudad portuaria y no se decidía si llevarsela a ella a la cama o a la humana esa con la que había estado días atrás, en fin, todo un panorama curioso y la verdad es que poco me interesaba, tenía cosas más importantes que hacer que ver las subnormalidades amorosas de los demás, suficiente tenía con las mías y probablemente peores, pues Rayan estaba en peligro y por negligencia mía...

Su aparición por Bahía del Botín me alegró, atormentó y enfadó al mismo tiempo. ¿Que cómo se puede sentir esas tres cosas a la vez? Es sencillo... para mí sí al menos... Me alegraba estar con él, era lo que más podía desear, pero... Me atormentaba pensar en lo que había hecho, siendo incapaz de contárselo... Me enfadaba el saber que estaba relacionado con la mujercita del piratucho, Izanguere, ella se llamaba Lyriah, compartían el vínculo de la Leyenda que había leído una vez en su casa, cuando metí las narices en sus libros. La idea de que estuviera más bien allí por ella que por mí, me cabreaba a pesar de que no se lo comentaba, era estar a su lado y eclipsaba todas las demás emociones... Que estúpido es el amor, lo sé...

Intentó mantener una charla sobre mi pasado y fui algo reacia, no es que no confiase en él, si en alguien confiaba era sobretodo en él, pero seguía incomodandome hablar sobre lo que había pasado siete años atrás, ¿Qué necesidad tenía de recordarlo? Solo eran traiciones y abandono, estaba harta de eso, ahora las cosas eran distintas... O eso creía yo. Con él ya no estaba sola, ya no lo estaría nunca más... eso pensaba, pero tenía que salvarle de ese trato con el dragón. La sola idea de perderle era inconcebible, estaba dispuesta a hacer cualquier cosa para evitarlo, "¡Como si tengo que hacer un pacto con el propio Diablo!" ... me decía a mí misma, JA... que ironía, lo hice...

El engaño de Sephyr

Cómo iba a saber yo que esa anciana era un maldito demonio...

Después de que Rayan abandonase Bahía del Botín, tuve otra visita, aunque esta vez distinta, Caledhris... Bueeeeno va, tampoco era malo, una cara conocida. Dejando de lado sus habitos, como el resto de tipos que frecuentaban la ciudad portuaria, Caledhris era de confianza. Le hice un resumen de las aburridas semanas allí y me preguntó si ya había encontrado alguna solución al problema del dragón... ¡Vale, si! He perdido el tiempo aquí... ¡Pero no me lo tires en cara, leches!

Intentó animarme, muy a su manera claro... y nos dispusimos a ir hacia el mercado para comprar hilo. Me hacía falta para recambiarlo de mi Tirachinas Arcano.

Nazamur, como de costumbre, se apareció a nuestro lado, así como quién no quiere la cosa y mientras le explicaba a Caledhris sobre este curioso animal... una anciana nos llamó la atención. Tenía las típicas pintas de embaucadora que tira las cartas y hecha la suerte. Habría pasado de ella de no ser porque me llamó por mi nombre... Pero no dijo Redyan, no... conocía mi nombre real, Eysilla. Eso me sobresaltó de repente, no creía que quedase nadie vivo que pudiera saberlo, a parte de Rayan, claro... aunque quién sabe si alguno del pueblo Corona del Sol, habría sobrevivido, serían Quel'Doreis ahora, probablemente... pero no ancianas adivinas, no...

Con mi atención puesta en ella, nos acercamos cerrando un poco el círculo de alrededor, para hablar con ésta, de forma más discreta.

La anciana comenzó a decirme que sabía de mi dolencia, mi problema... incluso mencionó sobre Nazamur, explicándome que era un Guardían del libro del Dragón, que al estar ahora corrupto y su equilibrio roto, habría logrado salir del ilusionario libro mágico, al mundo real... "Que cosas" ... pensé por un instante, ojalá pudiera llegar a realizar Ilusiones de ese calibre e incluso traerlas al mundo real, pero claro, yo no soy un dragón azul, JE...

La anciana dijo llamarse Sephyr y prometía una solución a mis problemas. A cambio de deshacerme del trato con ese dragón, debía traerle un artefacto. Un cambio bastante justo, tentador... sería libre de todo si le traía solamente un orbe que estaba en posesión de una bruja Naga... Más que tentador, parecía un milagro caído del cielo, pero mi desesperación por solucionar eso de una vez no accedió a dudar mucho, acepté. Total... ¿Qué más podía ir mal a estas alturas? ... eso pensaba. Solo era ir a coger ese orbe y en caso de timo, pues tampoco perdía mucho, volvería a estar en el punto actual.

Con esa idea, partimos yo y Caledhris hacia el Arrecife Mortal, con su barco. El nombre del arrecife me daba bastante igual, en estas zonas suelen bautizar los lugares con nombres que parece que vayas a diñarla y luego ni pasa nada. Y ciertamente todo lo que pintaba como una apasionante aventura, en esa tarde, fue más confuso que otra cosa... Llegamos a la zona del arrecife y tomamos una poción cada uno, para respirar bajo el agua. Adentrándonos en las profundidades del arrecife, divisamos unas ruinas de lo que habría sido tiempo atrás, un templo. Se podía apreciar un gran pasillo y ibamos cruzándolo con la tensión, pensando que en cualquier momento podría aparecer algun monstruo marino, enemigos o a saber qué... pero nada apareció. Fue lo más absurdo del mundo, llegamos hasta una sala sumergida, con estatuas Naga en sus extremos y la supuesta Bruja Naga en el centro, muerta. Si, tal como digo, ya estaba muerta... El orbe se encontraba al fondo, colocado en un altar con una figura que lo sostenía con sus manos de dura piedra, conservada a pesar de estar bajo esa profundidad.

Cogí el orbe percibiendo al instante una sensación enrarecida. Ese artefacto contenía mucho poder, cualquier elfo que posase sus manos en éste, lo habría podido notar, pero por alguna razón, Caledhris, no podía tocarlo. El orbe rechazaba esa opción, así que lo llevé yo hasta la superficie, divisando una Isla muy cerca. Nada más pisar la orilla de ésta, fuimos asaltados por una Sin'dorei, ataviada con ropajes de cuero negro y rojos... Estaba dispuesta a acabar con nosotros si no le entregábamos el orbe y lógicamente yo tampoco estaba dispuesta a dárselo. Si ese orbe de verdad podía ser la liberación de mi errado trato con el dragón, tendría que matarme, sí, para hacerse con el. Pero no, no hizo falta... Pues cuando la Sin'dorei estaba a punto de avalanzarse sobre mí, Sephyr intervino, mostrando su verdadera forma... o probablemente una que escondía menos lo que era en realidad. Dejó inconsciente a esa Sin'dorei, con solo levantar su mano y conjurar un hechizo, en un lenguaje que me era desconocido pero por alguna razón me resultaba familiar, Eredun... "Hay que joderse" ... ¿De que sabía yo el idioma de los demonios?

Todo empezaba a ser irritante y confuso. Sephyr extendió su mano esperando que le hiciera entrega del orbe y lógicamente desconfié, pues lo que antes era una anciana ahora se veía como una elfa, habría parecido una Sin'dorei como nosotros, de no ser por la notable aura rojiza que la envolvía y que denotaba una magia y poder fuera de mi conocimiento.

Me tentó nuevamente con sus palabras, hablándome sobre mi familia... y decía saber porqué mis padres me dejaron a cargo de Dhalassir y Eyrille. "Maldita sea" ... pensaba yo. ¿De verdad esa mujer conocía tanto o era una experta embaucadora? Llegué a pensar que tal vez había estado metiendo las narices en registros sobre los fallecidos del pueblo, habría encontrado esa información de alguna parte... Pero no, era demasiado lo que sabía, cosas que no podría encontrar de otro modo que simplemente sabiéndolo.

Le entregué el orbe... y tras sonreír con macabro cinismo, me dijo que pronto mi cooperación daría sus resultados, sería libre del trato con el dragón y nos volveríamos a ver... "Nuestra madre estará orgullosa" ... soltó antes de desaparecer. ¿Nuestra madre? No me jodas... realmente sabía como tentarme, era demasiado curiosa y aquello poco a poco me empezaba a obsesionar, hasta el punto de notar que yo misma estaba cambiando...

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias V Ruleta de la des-fortuna

Siempre había soñado en poder vivir fascinantes aventuras, formar parte de una misteriosa leyenda escondida para el mundo, ser la heroína de un gran ac0ntecimiento. Creía estar empezando a adentrarme en algo así, pero no, no imaginaba que la ruleta de la "fortuna" tenía ya elegido un papel muy distinto para mí... Yo no estaba destinada a ser la heroína de ésta, más bien lo contrario.

La casita del árbol

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

Regresaba de nuevo a Quel'Thalas, obsesionada con la idea de que Sephyr habría jugado conmigo, tenía que asegurarme de que todo lo que decía no eran más que patrañas... pero, ¿de dónde habría sacado la información? Sabía demasiadas cosas sobre mí e incluso conocía cosas que a mí jamás me habían dicho. ¿De verdad me ocultarían algo así Dhalassir y Eyrille?

En cuanto puse los pies en la Capital, Lunargenta, entorné mis pasos apresurada fuera de la ciudad. No tenía intención de quedarme allí ni un segundo más, estaba deseosa de llegar a mi casita, mi hermosa y adorada casita del árbol.

Mientras me adentraba hacia el Bosque Canción Eterna, era siempre esa misma sensación, como si navegase entre la espesa neblina en la que se convierten las vivencias de infancia. Dejándome llevar a lejanos mundos internos unidos por puentes de recuerdos. Cruzarlos, y descubrir lugares olvidados. Perdiéndome en ellos, sin miedo, sabiendo que allí nada podía sucederme. Mi hogar... mi pequeño rincón, mi mundo de sueños.

Una claridad oscurecida mantenía todo en una frágil penumbra. El ambiente, calmado, parecía reposar tiempos pasados. Aquellos tiempos de niñez, donde solo existían risas y juegos, despreocupados de toda responsabilidad.

Un árbol extraviado se vislumbraba en el pequeño claro, mostrando su tenue silueta, forjada a la intemperie. Su tronco, encorvado por el paso del tiempo, se retorcía incesante, posando en cada chasquido un quejido. Sus ramas, quebradas, se alzaban resecas, clamando sin voz.

Un frondoso haz de hojas se amontonaban alrededor de lo que se asemejaba a una pequeña casita de madera. Cuidada al detalle, parecía salida de sueños remotos, de magia, fantasía e imaginación. A sus pies, una larga escalera se alzaba desde el suelo, rotos sus últimos peldaños.

Hogares como este son los que habitan esos pequeños seres que al anochecer, cuando la vista se convierte en el más inútil de los sentidos, recorren presurosos los más extraños recovecos de nuestra existencia. Seres que cobraban vida en mi mente, cuando soñaba despierta.

Pero esta casita del árbol, al parecer, se mostraba ahora vacía, repleta de criaturas ausentes. Y en ella las preguntas pendientes solo recibían como respuesta el eco del silencio.

¿Eliyion? ¿A dónde había ido? Era extraño no encontrarle allí...

El habitante de antaño se había desvanecido. Dejando la puerta entreabierta, sin despedidas en palabras, se marchó.

Entré al interior de la casita que ambos habíamos construído en lo alto de ese árbol de sueños, ahora vacía por completo, notando enseguida la ausencia de todas sus pertenencias.

Me acerqué a la mesita donde tenía mi juego de alquimia y pude ver la carta:

"Doral ana'diel Redyan

Quiero expresarte mi despedida, con esta carta, no he querido hacerlo en persona ya que seguramente te habrias enfadado o me habrias dado galletas hasta que no pudiese más y no habria podido irme.

¿Te preguntas por que me voy?, supongo que lo sabras, Quel Thalas se me hace pequeña, mi sueño de cazar grandes bestias esta alli fuera con los grandes cazadores de Azeroth, mis objetivos no se pueden encerrar en estos bosques. Siento haberte dejado sola, pero supongo que habra muchos elfos encantados de ayudarte mucho más de lo que yo habria podido.

Puede que algun día nuestros caminos se crucen, y podamos volver a pelear contra los trolls de los bosques, yo te echare mucho de menos y si algún día deseas volver a recordarme mira esa lanza plateada que te regale, puede que me veas en ella.

Solo espero que no me olvides pues has sido una gran amiga y buena persona conmigo.

Sinu a'manore Redyan

Con un fuerte abrazo Eliyion"

... ¿Porqué? ... Me vine abajo por completo. Primero Lanthal... luego la desconfianza de Herendil, cuando me traicionó y me dio la espalda después de conocer a esa pija... Y Lynx, igual... desapareció un dia de pronto sin más... Ahora Eliyion... ¿Porqué todo el mundo me abandonaba? No pude evitar que las lágrimas cayeran esa noche, en la soledad y silencio de la casita, los sueños se habían ido, escondidos, desperanzados.
  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias VI Ante la duda más dudas

¿Almas gemelas o almas en pena?

Después del abandono de Eliyion me sentía furiosa... casi sin entender porque, poco a poco, una sensación de ira y odio se iba apoderando de mí. Todo el mundo me daba la espalda, empezaba a estar harta. ¿Qué podía hacer? ... Rayan... enseguida pensé en él, la única persona que me quería... Fui sin pensarlo a su casa, esperando poder verle, esperando poder evadirme de toda esa rabia. Llamé a la puerta en mitad de la noche, como una tonta, medio llorosa, cual perrito abandonado que regresa después de haberse escapado... y ... el silencio fue la primera respuesta al intento. Volví a llamar y pocos minutos después, Inathiar se asomó por la puerta.

Debia tener una cara de moñas increíble porque me miró bien raro, que verguenza, desde luego la desesperación nos hace hacer gilipolleces a punta pala, tiempo atrás criticaba de la gente, las mismas cosas que estaba haciendo yo misma ahora... patetica, sí, así me sentía, patetica, pero nada más podía hacer... ya estaba metida en este torbellino de emociones contradictorias.

Le pregunté a Inathiar si podía pasar y ver a Rayan... su respuesta fue como una patada en toda la boca. ¿No estaba? ¡¿Cómo que no estaba?! .......... ¿Y donde leches estaba? ... Eso mismo fue lo que le pregunté. "No lo se, señorita Redyan" ... esa fue su respuesta.

Si no hubiera puesto esa cara de incertidumbre que me confirmaba que realmente no tenía ni puta idea de donde estaba, creo que le habría zarandeado como una loca desesperada hasta que me lo soplara. Pero no, realmente no lo sabía y yo comenzaba a... divagar... divagar mis sospechas, mi mente retorcida y desconfiada, jugandome las peores malas pasadas, cuando algo así ocurría, ya era incapaz de confiar pacientemente. ¿Estaría... con ella? ... ¡No, no, no y no...! ¡Eso no podía ser, no podía ser! ... Si que podía... mi mente volvió a hacer su reverso. Sí, podía ser, podía ser porque ya lo había hecho, incluso cuando estuve en Bahía del Botín... ¿Me había ido a ver a mi... o a ella?... Empecé a sentirme furiosa... celosa... iracunda. Si alguien pasase en esos instantes por mi lado, le daba una paliza, ¡aunque no supiera ni quien fuese!

Necesitaba quitar esos pensamientos de mi cabeza, no, no, no y no... ¿Podía ser... podía ser que le hubiera pasado algo? Forcé mis pensamientos a un sin fin de teorías y hipotesis, cualquiera que me sirviese de excusa para deshechar la idea de que estaba con esa despreciable princesita presumida, a la que todo el maldito mundo parecía adorar...

Me costó horrores convencerme de que Rayan no estuviese en esos momentos, dandole palmaditas en el hombro o quizá... algo peor. ¡No joder! ¿Pero que gilipolleces pienso? Él me quería... a mí, nosotros eramos como almas gemelas ¿verdad? Por eso nos conocimos de pequeños, por eso nos volvimos a encontrar ahora, en una situación tan similar. Nos entendíamos, eramos iguales.

Llené mi cabeza de esas ideas e incluso una sonrisilla de atolondrada se debió formular en mi rostro, solía pasarme cada vez que pensaba en él. Un tipo en mitad de la calle, bañada por la luz de las farolillas, me miró. ¿Que coño miras imbecil? ... No, no se lo dije, pero lo pensé.

Empezaba a darme pena a mí misma... "Criatura patetica" ...

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias VII La caja de "Pandora"

Secretos que no debía conocer...

Comencé a pensar en todo de Sephyr y sin demorarme más me aboqué por completo en esa tarea. Era hora de descubrir que pasaba con eso y si de verdad podía ayudarme a salvar a Rayan... ya bastaba de perder el tiempo con lloriqueos y tontainas.

Intenté pensar cómo habría conseguido toda esa información y casi sin darme cuenta ni del motivo, me vi arrastrándome por Tierras Fantasmas, como ahora le llamábamos... y desde luego el nombrecito le pegaba, porque todo estaba cubierto de destrozo, de recuerdos pasados, lo que una vez fue ese lugar, ahora solo quedaba desolación.

No había vuelto allí desde....... Sí, desde que yo misma me subí a ese carro con Niere y su familia, para huir del pueblo siete años atrás. Fue realmente desagradable ver como había quedado todo Corona del Sol... Me sumí por unos instantes en los recuerdos de lo que fue y no lo que era ahora, mientras mis pasos rodeaban la fuente de piedra hecha a pedazos... Que curioso es el poder de la imaginación, llega a transportarte por completo a otro lugar, a otros tiempos, en solo unos instantes y casi jurarías que aquello es real, pero basta para abrir de nuevo los ojos y despertar...

Lo único real que había allí era la propia Sephyr... no noté desde cuando llevaba observándome, pero allí estaba, de pie justo en la entrada de lo que antaño había sido la tiendecita de Dhalassir y Eyrille... Entendí enseguida, que algo iba a mostrarme, y ya perdida en todo ese asunto, me dejé llevar.

Mi mente se vió confusa en unos recuerdos fragmentados, mientras Sephyr me hablaba en el interior del destrozado lugar. Encontré aquella cajita que contenía todos los secretos que probablemente nunca debí saber... cartas de mi madre hacia Dhalassir, donde le contaba el motivo por el cual me dejaron a su crianza. ¿Me habían abandonado también mis padres? Hijos de... ese tema ahora me tocaba la fibra sensible, era mi punto débil y me enfureció... A medida que iba leyendo cada carta, me sentía más iracunda y confusa, al mismo tiempo. Hablaban sobre una maldición... una maldición desde tiempos remotos, en nuestra familia, ¿nuestro linaje? Malditos por los propios demonios, su venganza cobraría forma bajo nuestras acciones... ¿Que cojones era eso? ... Quise negármelo, pero la evidencia de todo era demasiado contundente y todas las piezas encajaban.

No tardó Sephyr en ponerme al día. Había sido abandonada y puesta al cuidado de Dhalassir y Eyrille, como un intento de evitar que esa maldición me afectase. Un poco tarde para eso... Sephyr me había encontrado, que puta gracia. Pero no era ella quién realmente estaba interesada en mí, sino su "maestra", la que ella llamaba "nuestra madre" ... ¿Quería decir eso que Sephyr alguna vez había sido una elfa como yo o... cómo? ... No terminaba de entenderlo, y equivocada estaba, pues no era Sephyr quién había padecido esa dramática transformación. .... Eireen ... ese nombre... ese nombre me sonaba... ¿De qué? ... Pronto caí en ello ... el libro de Rayan ... Joder, la leyenda que un día cotillee en su casa, sobre el linaje Windriel... ¿Yo estaba relacionada? ...

Empecé a sentir nauseas, la cabeza me daba vueltas y mi vista se oscurecía en cuanto posé mis ojos en el orbe que Sephyr había colocado encima de una mesa. Mientras ese redondeado y condenado objeto comenzaba a emanar un brillo rojizo, mi cabeza se fue perdiendo en otro lugar... En los recuerdos de lo que un día no fue un demonio... y fue alguien como yo... alguien que solo quiso ser querida... "Eireen" ... Su voz resonaba en el infinito y oscuro agujero de mi inconsciencia.

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias VIII Memorias de un ser desdichado

Sueño, realidad o... ascensión del demonio

Era como una nebulosa... ¿estaba en un sueño? o... estaba mostrándose ante mí, algo que debía comprender...

~ ••• ~

Todo era blanco y frío, en un día amanecido bajo heladas cortinas de insensible viento y siniestras brumas de evanescentes nieblas, que cubriendo el cielo con finas y artísticas bagatelas de albinos hilos, daban a conocer un nuevo y fastuoso amanecer.

Aparté la niebla como quién revela el celeste cielo tras unas blancas cortinas. El lugar todavía dormitaba. Los árboles albergaban una suave seda oscura con la que la noche los había sorprendido.

Las dulces gotas brotadas de aquel acaramelado cielo ambarino, florecían de las ramas y de los macizos troncos de aquellos gigantes, que ronroneaban sus últimos segundos de sueño.

Sigilosamente me acerqué a un pequeño estanque, a las aguas prohibidas, cual largos y finos rayos de luz pintaban el reflejo de mi pálido rostro. Unas oscuras alas angelicales brillaban ante la blanca luz que pintaba aquel híbrido sentimiento de tristeza y rencor, había despertado de un largo letargo, y me colmé de un sentimiento de pérdida y anhelada venganza.

Cerré los ojos. Era como recordar una vida mortal anterior y el hedor de la oscuridad engullía mi alma; la muerte había saciado la sed con su gélida sangre, y tantas sombrías memorias parecían lejanas junto con la claridad de un nuevo día. Abrí los ojos de nuevo, pero el vacío que sentía en mi interior era tan intenso que cegaba cualquier rayo de esperanza que pudiera confortarme.

No sentía el latir de mi corazón, ni el trayecto de la sangre por mis venas... aun así, desgajé todo brío de fortaleza, y desahogué el dolor ante aquellas verdosas aguas que me acechaban... Las pequeñas lágrimas que se deslizaban por mis mejillas, se transformaban en lágrimas de sangre. Mis pálidos ojos esmeralda miraron hacia el frente, y una extraña sombra se alzó al otro lado del estanque...

El brillo rojizo de los ojos de aquella oscura figura, me sobrecogieron por completo, sintiendome en mitad de un remoto lugar, escondido de vida y muerte.

Entonces... una helada sensación recorrió todo mi cuerpo, algo o alguien había sorprendido y desgarrado mi inocencia, tras creer que la venganza de la muerte sería posible. Rápidamente me giré, y me vi a mi misma, reflejada en aquel ser, aquella que una vez fuera solo una elfa con esperanzas de ser amada y solo el dolor consumió, presente ante mí con un rostro de sinistro letargo... durante tanto tiempo...

Las temblorosas manos de un mortal se aparecieron detrás de su silueta, Verendil... el mortal le ofrecía el preciado tesoro que en vida le había regalado, aquel colgante argentado, con aquella esplendorosa piedra de diamante... ahora el diamante supuraba sangre... la misma que emanaban mis lágrimas.

El tiempo retrocedió al pasado, por unos momentos, cuando en aquellos tiempos estaban juntos de nuevo y se miraban por última vez. Ella era una elfa joven de largos cabellos rojizos y ojos azulados. Ambos se regalaron el corazón de su amor bajo promesas incumplidas... Pero... una sombra rozo sus cuerpos repentinamente, sobresaliendo del subsuelo... cegando esa imagen simbólica de lo que una vez fueron.

Todo se hizo en silencio... un silencio que rasgaba todo pensamiento esperanzador, sucumbiendo entre un aire alzado que mostraba las maléficas puertas de las tinieblas, como el aliento olvidado de hallar una vida perdida.

Empecé a sentirme asfixiada por el desgarrado y lúgubre sentimiento de agonía. Seguía mirándoles mientras ambos entrelazaban falsas esperanzas para dar fin a una siniestra desesperación por parte de ella.

... Aquella lúgubre sombra los estaba separando. Eireen caía en las aguas, parecía ahogar su vida con la negra profundidad del dolor... Y aquellas lágrimas de sangre brotaban ahora bajo sus párpados, que a pesar del sufrimiento, se ahogaba por fin aferrada a los brazos de la muerte, y como un extraño milagro, su vida inmortal nacía, como un nuevo capítulo de un antiguo y mítico libro... sus argentadas y ancestrales letras, se escribirían a lo largo de su venganza...

~ ••• ~

Cuando creí despertarme de aquel sueño, pude notar que todas las sensaciones seguían latentes en mí... poco a poco empezaban a formar parte de lo que yo era... ¿Yo era ella? ...

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Relatos: El Libro del Dragón Azul III

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

Todavía se encontraba entre los restos de la derruída casa en el poblado Corona del Sol, junto a Sephyr. Se sentía extraña, diferente... desde el momento en que aquel orbe brilló y se sumió en la oscuridad del sueño anterior. De repente crecía un torbellino de sensaciones nuevas y en su memoria se hacía presente una voz poderosa, más fuerte que su propia voluntad...

- Has cumplido lo que acordamos. - le dijo Sephyr. - Pero todavía hay mucho que hacer. - añadió.

Redyan frunció el ceño y la miró fríamente. Pudo notar un intenso dolor en la raíz de su cabellera y llevó su mano hasta ahí, mientras se acercaba a los fragmentos del destrozado espejo que había al fondo de la habitación. Viendo su imagen entrecortada, entre éstos, pudo darse cuenta que parte de la raíz donde nacía su flequillo, crecía una extensa quemadura que parecía proceder de un símbolo ténuemente morado. Poco a poco el símbolo dejaba de ser visible, quedando nada más que la resquemada herida.

- Ella ha vuelto a nacer. - dijo Sephyr, mirándola.

- ¿Ella? - preguntó Redyan volteando para mirar a la demonio.

- Hicimos un trato, ¿recuerdas? Y esto es lo acordado. La hiciste regresar y ahora ella te otorgará el poder que necesitas para proceder. - explicó la demonio.

- ¿Eireen? - frunció el ceño, Redyan.

- Tienes su misma sangre, chiquilla. - dijo Sephyr. - ¿No lo notas? - sonrió mirándola.

Redyan entornó su mirada al suelo, pensativa. Sí, podía notarlo... se sentía diferente, poderosa, pero también un enturbiado sentimiento de agonía se iba apoderando de ella. El sueño de la noche anterior era la respuesta. La agonía que llevó a Eireen a ser lo que fue. Ahora esa agonía era suya y todos los sentidos de Eireen rondaban su mente, como fragmentos de dos seres en uno, y una eran ahora. Sangre de su sangre... como Sephyr había dicho.

- No es esto lo que yo pedí. - alzó la mirada a Sephyr, con desafío.

Sephyr sonrió, como si hubiera estado esperando esas palabras durante rato. Se agachó ligeramente recogiendo el libro que había encima de la polvorienta y destrozada mesa. Lo abrió y extendió frente a Redyan.

- Ella fue la primera. - dijo Sephyr.

- ¿La primera? - preguntó Redyan, a la defensiva, aun mirándola con desconfianza, creyendo que evadía el tema.

- Sí, la primera en entrar. La única que completó el ritual hace milenios atrás. - dijo Sephyr explicando brevemente.

Redyan alzó una ceja poniendo atención al libro... Era el mismo libro que ella había encontrado en su viaje a las islas de Izal-Shurah, el libro del dragón azul. Entonces recordó las palabras de la oráculo, la última vez que había entrado en el libro, junto a Caledhris. ¿Eireen había sido aquella que lo completó antaño? Recordaba que la propia oráculo se lo había explicado, que solo una persona antaño cumplió la historia entera y obtuvo los poderes.

- Joder... - murmuró Redyan, audible.

Ahora iba atando cabos...

- Ella obtuvo los poderes del libro. Una obra maestra del Ilusionismo, sin duda. - respondió Sephyr.

- Pero ahora está corrupto... y ese maldito dragón me engañó. - le repitió Redyan, por si lo había olvidado y así retomaba el tema del trato que ambas habían hecho en Bahía del Botín.

- No te preocupes por eso. Jugaremos nosotras con ese dragón ahora. - dijo Sephyr.

- ¿Jugar con el dragón? ¿Crees que podemos hacer eso? - frunció el ceño Redyan.

- ¿Que si podemos hacerlo? - respondió Sephyr, en un tono jocoso, como si se burlase de la ingenuidad de Redyan. - Chiquilla, ni él es rival para tí ahora. Además solo necesitamos usar la astucia. - sonrió.

¿El dragón no era rival para ella? Parpadeó Redyan, pensando en esas palabras. ¿Tan poderosa era Eireen?

- ¿Y que propones hacer entonces? - preguntó de nuevo Redyan.

- ¿No te has fijado que ya no tienes las escamas? - señaló hacia sus brazos, Sephyr.

Redyan miró sus antebrazos y en efecto, las escamas que habían empezado a aparecer en el momento que el dragón la engañó con aquel trato, ya no estaban.

- Ya no puede poseerte. Así que si quiere salir de ese libro como tanto anhela, necesitará ahora nuestra ayuda. Le utilizaremos nosotras esta vez. - explicó Sephyr.

Redyan comprendió entonces, con facilidad, lo que trataba de decirle Sephyr. Ya solo tenía que volver a entrar al libro y re-hacer el trato con el dragón si éste deseaba salir de su ilusória prisión. No solo ese era el plan, claro. Convertirlo en un aliado podría ser mucho más beneficioso y así además, Redyan, saborearía la dulce venganza de someterlo.

El mundo dentro del libro estaba desolado. Lo que antes debieron ser grandes montañas y hermosos paisajes, era todo un desierto rocoso y arenoso. Parecía que todo se iba despedazando a grandes pasos, todo lo que fue esa maravillosa obra ilusoria, ahora se resquebrajaba.

Caminó durante un par de horas hasta divisar las ruinas de un templo. Se encontraba en la zona sureña y el calor abrasaba. Notó que no estaba sola, al principio pensó que quizá Sephyr también habría entrado en el interior del libro y que la estaría siguiendo, ¿controlandola tal vez? Pero no, no se trataba de Sephyr.

Justo en el momento que caminaba por entre las ruinas del templo, la presencia de su perseguidor, se hizo visible frente a ella.

- ¿Altaniar? - dijo Redyan, mirando la figura.

- Te lo advertí una vez... aun estás a tiempo de parar todo esto. - volvió a repetirle Altaniar, lo mismo que le había dicho la última vez que ella entró en el libro. - No debes invocar al dragón. -

- Me advertiste por la corrupción, ¿verdad? - dijo Redyan, con ingenuidad.

- Se que fuiste a ver la Oráculo, incluso ella te lo advirtió, pero no la escuchaste... - dijo Altaniar.

- El dragón ya no puede poseerme, Altaniar. - respondió Redyan.

- ¡Escuchame! - exclamó un poco, denotando preocupación. - No solo al dragón debes temer... He visto esa mirada antes y no eres tú. - frunció el ceño mirándola.

Redyan sintió una extraña incomodidad en cuanto el guardián Altaniar, le dijo eso. El control sobre si misma se nubló y sin poder hacer nada, Eireen tomó su voluntad en esos momentos. Le sonrió de medio lado a Altaniar, con altivez y arrogancia.

- Mucho tiempo sin vernos, Altaniar. - le dijo Eireen a través de Redyan, utilizándola. - Veo que este mundo no te ha tratado muy bien. - añadió en un tono jocoso.

- Nunca mereciste el poder que te otorgamos, te has convertido en una serpiente venenosa, deja en paz a esta muchacha, ella no es como tú. - le respondió Altaniar, con desdén.

- Oh, vaya... ¿te apiadas de ella? Ja, quién iba a decirlo, el "gran" Altaniar, apiadandose de una muchachita, ¿a qué me recuerda eso? - sonrió Eireen burlona.

- Nos engañaste a todos y destrozaste este mundo, no hay nada bueno para recordar. - dijo Altaniar.

- ¿De verdad pensaste que iba a quedarme aquí encerrada contigo? - se rió Eireen, burlándose del guardián.

- Púdrete en el infierno, ahora solo eres un demonio, nada queda de la mujer que un día fuiste. - respondió Altaniar con asco.

- Que lástima, antes me decías cosas más bonitas. - dijo Eireen, retirando la burla de su tono de voz y mirando seriamente al guardián, mientras alzaba su brazo y extendía la palma de la mano hacia éste. - Ahora, aparta de mi camino. - zanjó sus propias palabras, emanando una carga de energía fel hacia él.

Altaniar no podía hacerle frente, pero aun así, iracundo y enrabiado, se lanzó hacia ella tratando de defender lo poco que quedaba de ese mundo. Sabía que si avanzaba hasta el dragón, todo terminaría.

Sus esfuerzos fueron en vano. No le costó demasiado derrotarle y quitarlo de en medio.

Eireen llegó al interior de las ruinas y allí encontró al dragón. Pocas palabras tuvo que usar para convencerle. En cuanto le ofreció una salida, éste aceptó sin pensarlo y un nuevo trato fue sellado.

- Libre de la esclavitud del libro serás, pero a cambio, harás algo por mí. - le dijo Eireen.

- Bien... ¿Y que es lo que quieres que haga? - le respondió el dragón.

Eireen simplemente sonrió, complacida.

- Hablaremos de ello fuera de aquí. - concluyó ésta, estrechando la mano del dragón, ofreciéndole la salida.

Justo en ese momento el cielo comenzó a arremolinarse, quebrándose y un gran terremoto levantaba la tierra bajo sus pies. El mundo del libro había llegado a su fin.

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias IX Mi propio demonio

Una macabra obra de teatro

Me encontraba en aquel desconocido y extraño lugar. La tierra parecía estar despellejándose del subsuelo, la magia arcana era extremadamente presente, los árboles siquiera tenían vida, estaban formados por acristaladas porciones que se unían unas con otras como un puzzle; Las ruinas de lo que antaño habrían sido templos de culto de nuestros antepasados Altonatos, se alzaban aun majestuosamente. En el centro de las ruinas había colocado un altar con un rúnico círculo a su alrededor, dispuesto para el engaño. El orbe había sido colocado en el cetro, justo al lado del altar. Sephyr sonreía, complacida de haber ultimado su plan, tal como Eireen le había indicado que hiciese.

Sephyr se había encargado de ponerme al corriente antes de partir en busca de la Quel'dorei, ella iba a ser un señuelo.

- Deja que crean que todo acaba aquí. - le dijo Sephyr antes de partir.

Esperaba que creyeran que todo aquello había sido montado para invocar a Eireen, pero la única realidad es que Eireen ya estaba de regreso... Y yo era su presa. Podía notar como controlaba mi mente, una extraña simbiosis, sus recuerdos y pensamientos atormentaban mi conciencia, sin poder detenerlo, cada vez era más delgada la línea que distinguía las acciones de cada una y cuanto más tiempo pasaba, se hacía más fuertemente notable e incontrolable.

Miré alrededor con desgana al notar la presencia de aquella Sin'dorei, Tarantula. La había visto en alguna ocasión junto a Rayan, socia de sus negocios más turbios. No estaba allí precisamente en favor de él, no era más que un peón más de Sephyr, quién aprovechando sus ansias de apoderarse del negocio, esperaba que Sephyr la ayudase a deshacerse de Rayan, aliándose con ella. Muy equivocada estaba, pero eso solo lo sabía yo misma y Sephyr. Tarantula ignoraba que solamente había sido utilizada para atraer a Rayan y crear confusión.

Era demasiado tarde para hecharme atrás, ya estaba metida en todo aquello. Sephyr volvió con aquella Quel'dorei, Lyriah Windriel... Una extraña sensación me poseyó cuando la ví. De repente sentía ansias y una inmensa sed de venganza, la ira y el odio me inundaron, descontrolando mis sentidos e instintos, como un animal salvaje que divisa su presa, acechándola.

Los recuerdos de Eireen flechaban mi mente, afirmando emociones propias que yo misma había sentido y no logrado identificar en este tiempo. Esa Quel'dorei... ella era la culpable de todo, sí... ahora lo veía claro. Siempre estaba en medio, acaparando toda la atención y lo que era peor... de la única persona que yo necesitaba, Rayan. Tenía que acabar con ella antes de que me arrebatase lo que me pertenecía.

Lo que parecía un principio lógico, se había descontrolado en mí, pero qué podía haber más logico que tomar lo que me pertenecía, él era mio, de nadie más. La muerte de esa alimañosa Quel'dorei me libraría de un incordioso obstáculo...

Sephyr colocó a la Quel'dorei encima del altar, ésta estaba inconsciente y no despertó hasta la hora del espectáculo, cuando llegaron los invitados esperados. Lorian Sunlake... y Rayan, quién como yo bien sabía, era en realidad Alathen Sunlake, el hermano mayor del Archimago del Kirin Tor... Pero no estaban solos, tal como esperabamos, habían acudido con más ayuda; Un Paladin Quel'dorei, que respondía al nombre de Nostiag, dos forestales Quel'doreis, de nombres desconocidos y un Sargento Quel'dorei, del cual tampoco sabía gran cosa, pero lo que sí sabía era que todos ellos eran mis enemigos, si la defendían a ella, no merecían vivir. A pesar de mis ansias por matarles, el plan no cubría esa posibilidad.

Seguí al pie de la letra el papel que Sephyr esperaba de mí, siquiera sobreactué, realmente la idea de matarles tarde o temprano, embargaba mis sentidos.

Me sumí en un papel de víctima y confusión, mientras Sephyr me acercaba una daga imbuída en magia vil, para que yo misma hiciera creer que realizaría el sacrificio de la Quel'dorei en el altar y ponerles en tensión.

- ¡Detente bruja! - escuché exclamar al pedante Paladín.

Solo de mirarle, los recuerdos de años atrás, venían a mi mente... Niere... hipocritas y asesinos. Su falsa Luz, un burdo motivo para ajusticiar por su propia mano.

La rabia de esos recuerdos, enfatizó el momento y cogí la daga que Sephyr me ofrecía, con determinación y sin vacilar.

- ¡No lo hagas Redyan! ¡Detente! - escuché a Ray gritar.

¿Porqué la ayudas? Me pregunté a mi misma... mi odio por esa Quel'dorei crecía cada vez más a medida que transcurría esa macabra obra de teatro. Hacerles creer que todo aquello era para invocar a Eireen. Que lo crean, sí, y cuando termine, pensarán que se acabó, pero la verdad está aun por empezar, el juego no había hecho más que comenzar.

Enfaticé más el momento respondiendo vilmente alzando la daga hacia la Quel'dorei, como si me dispusiera a acabarla. Apenas pude reaccionar, cuando el Paladín se lanzó sobre Sephyr, batiendose con ella - (Deja que la acabe...) - me decía una tenebrosa voz en mi cabeza - (Ya no la necesitamos tampoco...) -. Obedecí a esa idea, desconociendo si era propia o algo más me instaba a pensarlo.

No me interpuse en la lucha del Paladín contra Sephyr y ésta pronto se dio cuenta de que una sonrisa cínica curvaba mis labios, no iba a ayudarla, su fin era ese.

- ¡No! - volvió a escuchar a Ray gritar, mientras corría hacia la Quel'dorei...

Giré inmediatamente mi atención, reparando en que el Sargento Quel'dorei, pretendía abalanzarse sobre mí. Pronto salió expedido, tras conjurarle unos misiles arcanos.

El metal de la flecha impactó justo en mi pecho, una herida mortal, debería... el dolor se intensificó a gran velocidad, viendome obligada a dejar caer la daga y mis rodillas crujieron levemente al chocar contra el suelo. No esperaba ese movimiento por parte de los forestales, demasiado rápidos. En esos instantes estaba convencida de que mi muerte había llegado.

Ray tardó en reaccionar, mientras se nublaba mi vista, solo pude escuchar algunas pocas palabras que trataba de decirme, como un eco que se aleja cada vez más y más.

La oscuridad lo envolvió todo y a pesar de que creí que era el fin, inmersa en esa propia oscuridad, aquella voz macabra volvió a resonar en mi cabeza... "No temas, el juego continua..." - dijo.

  • Me Gusta 2
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias X Ante la adversidad, supervivencia

Amor y Odio

- Isleña de Menethil - [Pocas semanas después de la muerte de Sephyr y Tarantula]

Me desperté en una vieja cama, la cabeza me daba vueltas, sentía un fuerte dolor en la parte derecha del cuero cabelludo y mi movilidad estaba menguada por lo que imaginé que todavía me resentía de la herida de flecha que me propinó ese asqueroso forestal Quel'dorei.

Estaba en una cabaña de madera, vieja y muy funcional, parecía más bien un refugio. De primeras me costó saber porqué estaba allí pero enseguida entendí el motivo, al ver a Ray, sentado al lado de una pila de leña.

Traté de hacer memoria de todo lo que me había podido conducir hasta ese momento. Recordé el altar, aquellos Quel'doreis, el cómo fui herida. Ray se habría ocupado de llevarme hasta aquí. Al menos impidió que esos Quel'doreis me matasen.

La cabaña estaba situada en una isleña, no muy lejana a las costas de Los Humedales. Tarantula había accionado su plan, en caso de que ella muriera, sus secuaces, harían que la Ley de Quel'thalas creyera falsas acusaciones sobre Rayan y le persiguieran. Era obvio pensar que eso ya estaba sucediendo en esos momentos, pues Ray se estaba escondiendo en esa isleña, sin posibilidad de regresar a Lunargenta.

Las heridas comenzaban a sanar, puede que llevase semanas inconscientes... Pero no solo éstas parecían ser mi único problema. Mi apariencia estaba cambiando, poco a poco. Mis dorados cabellos se volvían lentamente de un tono anaranjado, mis ojos desprendían un instenso brillo fel y una gran quemadura cubría la parte derecha del cuero cabelludo. Una fuente de poder desconocida, recorría mi cuerpo... Eireen... ¿Era ella?

Cada vez me costaba más controlar la ira, la rabia, la obsesión, la posesividad, la sed de venganza... Los recuerdos de Eireen seguían cruzándose entre mis pensamientos y hacían nacer en mí, emociones contrarias. La vivencia de los antepasados de la leyenda... el abandono, la traición, desolación... Una parte de mí no quería seguir con eso, asustada de lo que pudiera pasar, sentía que lo que conocía de mí no era más que un mero espejismo hasta ese momento, ¿siempre había vivido sin saber que era otro alguien o estaba convirtiéndome en ese otro alguien ahora? Comenzaba a dudar si realmente era Eireen quién me manipulaba o si yo misma estaba comenzando a vivir la misma situación que ella milenios atrás...

Ray empezó a hablarme de lo ocurrido en la zona del altar. Sus palabras se volvieron como cuchillos afilados, recriminando mis acciones, defendiendo a esa Quel'dorei... Cuanto más me hablaba de ello más cuenta me daba de lo que no había querido ver hasta ese momento... Su forma de hablar de ella, la preocupación que había mostrado hacia ella en ocasiones pasadas, siempre que ella lo necesitaba acudía en su ayuda, sus visitas a Bahía del Botín cuando Izanguere trataba de recuperarla... Ray había ido allí por ella, no por mí... ahora lo veía todo claro... la verdad ante mis narices, él la amaba... en secreto; Un secreto que no había revelado jamás, escondido en lo más profundo, pero que no escapó a mi observación.

En ese momento fue cuando recordé el día que descubrí el libro de su linaje, en su caserón de Lunargenta... la leyenda, nuestros antepasados... Verendil, Eireen, Sumiee... La historia se estaba repitiendo, todos los desciendientes de cada uno de ellos, reencontrados en una misma epoca del tiempo, ¿es eso lo que Eireen había planeado? Aquel día en el que leí el libro, sentí la primera punzada de celos... y le formulé mi duda, sí, recuerdo que aquel día le pregunté si él... sentía algo por ella y su respuesta apaciguó todas mis preocupaciones, al decirme que no; ¡Pero me había mentido...! Como pude haber sido tan estúpida de no haberlo visto antes, ambos son descencientes de los traidores... ¿Significaba eso que yo iba a perderle? ¡No, no, no! No podía permitirlo...

Por momentos la rabia me invadió y un devastador sentimiento de odio hacía salir lo peor de mí, quería matarle con mis propias manos, No... ¡No podía hacerlo! ¡No, no! Estaba divagando... ¡Como podía pensar en matarle! Sin él, yo no era nada... nada tendría sentido... Pero y si... ¿y si ella me lo arrebataba?

Tenía que acabar con todo aquello, fuera como fuera. No entendía qué me estaba pasando ni porqué mi aspecto cambiaba... ¿Acaso esa demonio estaba intentando hacerse conmigo enteramente? Había algunos momentos en que sus pensamientos se cruzaban con los míos, no lograba distinguir mi realidad de la suya... La idea de dejar de ser yo misma quién controlase mi destino empezó a aterrarme... ¡Tenía que conseguir hacerla salir... tenía que haber algun modo de que esa pesadilla terminase!

Tenía que tomar alguna decisión, antes de que mis días fueran consumidos por la demonio. Escuchaba su voz, instándome en su venganza... quería la muerte de la descendiente de Sumiee... Su vida no me importaba, incluso yo misma albergaba un profundo odio hacia ella, poco a poco... Si la matase, acabaría con todo, ¿que otra solución tenía? No tenía nada más...

Ray se negaba en rotundo y cuanto más se negaba más crecía ese odio... ¿como podía quererle y odiarle al mismo tiempo? ¡Maldita sea! ¿Porqué era tan importante ella? ¿Acaso no le importaba que me consumiera esa demonio? Se mostraba distante y reticiente... tendría que hacerlo yo... pero primero debía encontrarla.

  • Me Gusta 1
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias XI Negociaciones arriesgadas

Recabando información - Nigromantes, tinieblas y aciago

Regresé de nuevo Quel'thalas, yo sola. Le había prometido a Ray que vería como estaban las cosas por allí sobre el asunto de Tarantula y que una vez obtuviera información de la situación, volvería a la isleña para decirselo. Y aunque parte de mis intenciones al volver fueron esas, otra parte de mi buscaba el modo de encontrar el paradero de esa Quel'dorei... Ray me había entregado un anillo, pidiendome que nos casaramos... desconcertante aunque efectivo... en un atisbo de pensamiento, ¿de verdad me amaba? ¿o solo había usado aquello como un perfecto bis para que partiera a Quel'thalas en busca de la información, a sabiendas de que aquello le garantizaba cierta lealtad por mi parte? Una parte de mí le aceptó, rebosando de efímera felicidad, que pronto fue opacada por la desconfianza de la otra parte...

Nada más poner un pie en la ciudad no duré mucho en libertad. Las calles estaban llenas de carteles sobre la búsqueda de Rayan y a pesar de que mi aspecto estaba cambiando involuntariamente, no fue suficiente para ocultar mi identidad a ojos del Teniente Castien. Enseguida se dio cuenta de quién era y me retuvo para interrogarme, después de todo yo era la persona más cercana a él, a parte de Inathiar, su criado. El anticuario había sido cerrado por la propia guardia y aunque estaba dispuesta a asumir cualquier represalia o castigo, involucrada en todo aquello, nada de eso pasó... el Teniente creyó mis palabras sin ponerlas en duda, le dije no saber nada de él, que me había abandonado y desde entonces se había esfumado sin dejar rastro... Que irónico era mentir sobre algo que tarde o temprano sucedería... pero en esos momentos lo ignoraba, no podía permitir que me encerrasen más tiempo allí. Así pues en cuanto tuve la oportunidad volví a marcharme... Pero esta vez con un nombre en mi mente... Ragnos.

Recordé que Sephyr había tratado con él en el pasado... y que gracias a su colaboración, lograron apresar a la Quel'dorei. Un plan de lo más arriesgado, sobretodo tratandose de un Nigromante como él, quien había quitado cuantiosas vidas. Ese tipo tenía que saber de ella, valiosa información que yo necesitaba y a medida que mi obsesión crecía, por arriesgado que fuera, nada me detendría en mi propósito... estaba dispuesta a correr el riesgo.

A pesar de que no quería que nadie más se involucrase en todo aquello, mi repentino cambio de apariencia y el notable caracter afilado, no pasó desapercibido para Caledhris, quién finalmente, junto con Ciryon, descubrieron mi secreto... y el demonio que estaba devorándome, alimentandose de la sangre que compartíamos ancestralmente. Empeñados en ayudarme decidieron ir a Bahía del Botín conmigo. No me negué, pues una parte de mi clamaba ayuda... aterrada, luchando por deshacerse de esa maldición, de ese diabolico ser que me carcomía y me dominaba. Su influéncia era más fuerte que mi propia voluntad... Lograba aparecer cuando quería, manipulando la situación a su antojo, yo no era ya más que un títere... un títere que la llevaría a su objetivo, el mismo que perseguía yo llevada por el odio, los celos y la venganza...

Temí que de aquella reunión no saldría con vida, una menuda y escuálida chiquilla, presenciandose ante el Nigromante, Ragnos... pero mi voz no titubeó, mi helada mirada se posó en la de aquel individuo, pactando con este por obtener información y a pesar de que para llegar hasta él, me hice pasar por Sephyr, no tomó represalía alguna por mi mentira, a sabiendas que era la única baza que tenía para llamar su interés.

Regresé a Bahía del botín, después de la tensa reunión. Todos los nervios y el temor, acumulados durante esas horas, me hicieron venir abajo una vez a puerta cerrada de mi habitación. Miré mi rostro en el espejo... empezaba a olvidar mi aspecto, lo que una vez había sido y odiaba ese reflejo, me odiaba a mi misma... lo odiaba con todas mis fuerzas, mientras mis uñas desgarraban la piel a tiras de mi propio rostro, fría sangre brotaba de las heridas y solo un vacío inhundaba la habitación... ella envenenaba mis sentidos, siquiera sentía el dolor físico, pues otro intenso dolor oprimía mi pecho y opacaba cualquier otra sensación. Impotente ante mis propios actos, le necesitaba, en ese momento, le necesitaba a mi lado... y cuanto más me daba cuenta de que no estaba allí, de que siquiera parecía importarle lo que me sucedía, ni el peligro que corría con mis propios actos... el vacío se hacía un abismo. Siquiera, en mi desesperación, buscando quién pudiera llenar por un solo instante y acallar el dolor... siquiera Caledhris, hombre de mar, mujeriego y atrevido, renegó de tocarme, evitó mis insinuaciones, prefiriendo buscar en aquella noche, el calor de alguna mujer de la vida... Tan poco era mi valor ya... Aquella noche solo las tinieblas me acompañaron en su ocaso...

En los dias posteriores tomamos el barco de Caledhris, de regreso hacia Quel'thalas, pero yo me detuve en una cala intermedia en las tierras al Sur de Arathi, prometí reunirme con ellos en cuanto terminase mis asuntos allí. En realidad me detuve en ese lugar poque... tenía que verle... desde allí podía conseguir llegar hasta la isleña donde se escondía. Una parte de mí, desesperadamente, necesitaba mirar a sus ojos y encontrar aunque fuera una pizca de verdad, que arrojase atisbo de sentido a todo lo que hacía... necesitaba estar segura de que me amaba, que podíamos afrontar aquello juntos, que estaría a mi lado y no me dejaría caer en las tinieblas que me ataban a tan aciago destino...

Buscaba comprensión, su apoyo... y solo encontré mi propio temor, el temor de que él no aceptaría los mismos riesgos... una realidad cruda, Eireen hizo posesión de mí, presa de la ira por su desaprobación en terminar todo aquello, acabando a la Quel'dorei, para salvar mi propia vida... negó rotundamente y ella apareció a través de mí... mientras mis sentidos se batían en un duelo de emociones contrarias, aquella demonio estaba a punto de matarle, de mi propia mano... utilizándome, impotente, sin poder detenerla... pues ya su venganza era la mía.

No sabría si dar gracias o maldecir, la aparición repentina de su hermano, Lorian, quién guiado por la marca que les unía, percibió el peligro que se cernía sobre su hermano, ya rendido en el suelo, dispuesto a ser ejecutado. Lorian la detuvo... me detuvo en el propósito, impidiendo que acabase con la vida de Ray, haciendome frente lo suficiente para llevarselo, quedando levemente herida... y a medida que en mi soledad, por inercia mi cuerpo se encogía, no por el dolor físico, sino por... la certeza de lo que acababa de hacer, él no volvería a confiar en mí... Cuanto más luchaba por tenerle cerca, más lejos le conseguía...

  • Me Gusta 1
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Reflexiones: Vivencias XII Destino Adverso

Fantasmas de luz y sombras - Final en Quel'Danas

Me marché de la isleña al cabo de unos días, dándome cuenta de que probablemente no volvería allí... aun así no perdía todavía la esperanza, es pequeña y ya minúscula parte de lo que quedaba de mi propia voluntad, todavía quería creer que podría escuchar mis ruegos si le explicaba lo que sentía... Le dejé una simple nota en la choza de la isleña antes de abandonarla definitivamente y regresar a Quel'thalas. En mi nota, le citaba cerca del rio, allí donde en el pasado por primera vez me dijo que me quería...

Ilusa... ilusa de mí, esperé allí cada noche hasta la llegada de la madrugada, un dia tras otro y otro... Nunca parecía que fuera a llegar... Y en mi mente divagaban los peores temores, que ya estuviera demasiado lejos, en todos los sentidos, al lado de ella y no conmigo...

Círyon vino a verme, al darse cuenta de cuantiosos dias que llevaba allí a la espera de que Ray acudiese... -"Olvídale, Redyan"- ... me dijo... olvidarle... No podía, no podía por más que quisiera hacer entrar en razón esas palabras, ¿olvidarle? ¡Jamas! Él... me pertenecía... y de nuevo con el temor, mi obsesión se acentuaba, por más que Ciryon trataba de auyentarle de mis pensamientos más me cernía en la idea de que debía traerle de nuevo a mi lado... Si no podía ser mio, no sería de nadie... Esa Quel'dorei, ella... era la culpable de todos mis problemas... quizá él estaba de su parte ya, acabarla de una vez por todas terminaría con la venganza que Eireen tanto buscaba, así zanjaría su dolor y el mio... así recuperaría mi libertad, mi albedrío... y a Rayan. Cuanto más se iba mi mente hacia ese pensamiento, más estaba a merced de la demonio, su control sobre mí, sobre mis acciones, ni yo misma lograba ser consciente de ello. Tenía que retenerle, si acudía a mi encuentro tras leer la nota... debía retenerle allí para que no se interpusiera en mi camino hasta dar muerte a la descendiente de Sumiee, Lyriah Windriel... su fin sería mi salvación. ¿Como retenerle sin causarle daño?

Ciryon posó entre mis manos el pequeño frasco, un potente veneno de paralisis... con solo un par de gotas de este, no podría escapar... que tan retorcido plan, solo necesitaba que al final acudiese a mí y se confiara... solo un beso, un simple e inocente beso y le daría de beber la dosis...

Ya no era yo, sino ella... cuando llegó, acudiendo a mi llamada por aquella nota que había dejado en la isleña... al final se había arriesgado a adentrarse en Quel'thalas para acudir a mí... Una efímera parte de mi estaba siendo yo misma... observándome ante lo que sabía que estaba a punto de hacer... mientras sus palabras hablaban de ayudarme, pero de un modo que era incapaz de aceptar yo misma por mis temores... pesadillas del pasado que no quería revivir... ¿El Paladin Quel'dorei? ¡Jamas! Ese engendro no me tocaría un pelo... ¡¿Como podia confiar en ellos?! ¡Ellos querian matarme! Entre verdades y mentiras... mis palabras se vieron targiversadas por la voluntad de Eireen... estaba a punto de darle aquel veneno... pero no... no podía hacerlo. En un intento desesperado por vencer el control de la demonio sobre mí, iba a confesarle la verdad, que aquella no era yo, ¡Jamás querría hacerle daño! ¡No podía hacerle daño! Pero ella era más fuerte... llevó mis manos a mi daga, dispuesta a cobrar venganza por las palabras que él decía, palabras que no solo a ella la rabiaban, pues en su actitud, solo se preocupaba de esa quel'dorei... ¿yo no le importaba? ¿siquiera un poco para no llevarme ante ellos? ¿para no hacerme pasar por eso...? La daga presionaba su cuello, certera, amenazante... Iba a acabar lo que había empezado en la isleña y yo... no sabía como detener esa situación... Locura, valor o desmedida estupidez, tragué todo el frasco de veneno, no pretendía acabar con mi vida, pero sí detener a esa demonio, para que no le arrebatase la vida... Eireen rabiaba, mi acción había sido una ofensa para sus planes, a pesar de su control sobre mí, el veneno la detendría, aunque sin medir las consecuencias, eso podía acabar conmigo... si solo unas pocas gotas bastaban... ¿que ocurriría después de haberme bebido todo el frasco? Pero ningun razonamiento sobre eso me importó, su vida lo era todo para mí en esos momentos y el único modo que pude para detener aquello, fue desarmarme a mí misma... Eireen, presa de la rabia, por mi osadía de contradecir su voluntad, azotó mi cuerpo haciendo que aparecieran cortes por toda mi piel, desgarrándome... caí inconsciente por el dolor de esas agonizantes y diabolicas marcas; El efecto del veneno, también hacía mella en mi menudo cuerpo y que poco a poco sería mortal si nadie lo impedía...

Desperté en una comoda, espaciosa y blanda cama. Estaba en casa de Ray... ¿porque? ¿él me había traído hasta allí? ... su acción encendió un atisbo de esperanza, me sentía débil, muy débil... ¿como había conseguido un antidoto para el veneno? No tenía ni idea pero en esos momentos ese detalle no importaba, acababa de salvar mi vida... aun había esperanza... De nuevo traté de hablar con él para que entendiera, pero... no... todo fue en vano. Cuanto más luchaba por hacerle entender, menos me escuchaba y lo peor... es que sabía que en esos instantes estaba siendo enteramente yo y solo la verdad, la verguenza y mi desesperación se mostraban en la discusión... fuera lo que fuera ¡Yo no quería ir con ese Paladin! ¡Me aterraba! ¿No podía escucharme siquiera? ... estaba dispuesta a aceptar lo que fuera, buscar una solución juntos... sin acabar la vida de la quel'dorei... pero no atendía ninguna razón. Le había perdido... ya le había perdido... nada podía hacer, nada cambiaría su decisión. Sentí como si mi corazón se desgarrase, en cuanto salí por la puerta principal, cerrando de un fuerte portazo... mi respiración se detuvo por unos instantes que me parecieron eternos, claustrofóbicos... aun en mi ingenua imaginación, le imaginaba salir de la casa... salir y buscarme, que me cogiera y me dijera que todo había sido solo un error, que no terminaría todo allí... que seguiría a mi lado y me ayudaría a no ser devorada por esa demonio, fuera como fuera, de algun modo que no tuviera que sacrificar a nadie, incluso morir a su lado era una idea más dulce...

Nunca salió a buscarme... nada más alejado de la realidad, era obvio, se habría ido tal como se podía esperar ante la discusión, se había ido con ella... para ayudarla... para alejarla de mí... Eso era lo que yo era... un peligro, sentenciada, por esa demonio... mi destino...

Habría acabado con todo, mi muerte habría sido el fin de tanto sufrimiento, pero no lo hice, no lo hice. Caledhris y Ciryon no estaban dispuestos a rendirse y me dieron las pocas fuerzas con las que me embarqué de nuevo en el barco de Caled... destino a... mi adversidad... Sin plan, sin rumbo, con el horizonte como marca de mi mayor desconcierto... Si todo estaba perdido que importaba ya entonces, fuimos al lugar donde empezó todo... las costas al SurOeste de Quel'thalas... a las ruinas de la antigua casa Windriel... siquiera sabíamos que encontraríamos allí pero ya nada perdía en intentar cualquier cosa...

Irónico, tan irónico que no podría expresar palabras que atribuyesen a los hechos. En aquel lugar recondito, yacía el espíritu de Lord Jeldrast Windriel, quién tras ser asesinado a los pies de las ruinas de la casa, por la misma Eireen... su alma había quedado ligada a ese lugar, como si de un guardian se tratase... Y en su etéreo estado, careciente de emociones, a pesar de ello, se dio cuenta de que yo no era la demonio que le había dado muerte... sino otra víctima más en su posesión. Eireen pretendía utilizarme, hija de su sangre por el pasar de los años y aun asi, por alguna razón efectiva, más que la propia Lilith... quién solo había sido para la demonio, un títere, un cebo, un tormento necesario para sus manipulaciones... Pero yo iba a ser su avatar, aquella que cumpliría los designios que ella misma trazó maquiavelicamente... su ejecutora, su reencarnación... su nuevo yo, una vez culminase aquello que ella llamaba la profecía... una profecía que ella misma había creado y que esperaba conseguir a través de mi...

Todavía muchas preguntas sin responder en mi mente yacían vagando... preguntas que tal vez nunca tendrían respuesta pero que no eran importantes en ese momento, pues no me quedaba tiempo... Lord Windriel sugirió una solución... la Isla de Quel'danas... una fuente del sol, renovada, distinta... grandes sabios Draenei, que ahora vivian en la isla, ellos podrían ayudarme... Un intento desesperado, sin saber si eso realmente funcionaría... me aterraba igual solo de pensar en los Paladines... si eran iguales que aquellos que había conocido antaño... yo... Pero no tenía ya tiempo siquiera para replantear otra alternativa...

Irónico que aquel que confió en mi palabra, que escuchó mis ruegos, fuera Lord Windriel...

Era probable que mi vida acabase allí, si no lograban hacer nada por expiar esa demonio de mi cuerpo... No quería que nadie más estuviera allí... Tal vez cruel, pudo parecerlo, pero le pedí insistente a Caled, que se marchase... Ya había hecho suficiente por mí... Ya había sacrificado suficiente su tiempo y su vida en mi turbia historia... En realidad no quería que nadie se preocupase si ocurría lo peor... Me costó convencerle pero al final se marchó...

Quel'Danas, la isla de la fuente del sol... Extraños seres eran esos Draenei... pero tan diferentes a los humanos de Lordaeron... Kairthos... le debo mi vida a ese Anacoreta, como así se hacen llamar sus clerigos, dentro de su Raza. Salvó mi vida de ser devorada por esa demonio y a pesar de que en mi interior algo cambió para siempre... tras el extraño ritual, permanecí debil... como si la demonio hubiera consumido parte de mi vida, de mi alma... de mí...

Allí fue el final de la posesión... y también de mi vida tal como la había conocido... muchas revelaciones y otras tantas que nunca creía podría comprender ni obtener respuesta... Pero lo único que sí sabía es que... mi corazón no volvería a recomponerse... estaba rota... Comprendí, en el momento en que les vi llegar, a ellos... la Quel'dorei, el Paladin, aquel Sargento del dia del altar, Lorian herido y... Ray... No... Alathen, Alathen Sunlake... Ver como enterraba a Lilith, la verdadera... descubriendo lo que Eireen había tramado tantos años... años de manipulación... de muerte... de tinieblas... Comprendí... me comprendí a mí misma, lamentando lo que era... mi destino era adverso a él... por más que la luz hubiera expiado a esa demonio de mi interior, yo... la comprendía... porque había sido una vez lo mismo... una elfa, que en su mas hondo dolor, en la traición de todos aquellos que debían quererla y en el daño de perder lo único que amaba en la vida... se maldijo a si misma y a su propia sangre, por la eternidad... No eramos tan distintas... una vez ella también amo y tuvo fe... pero no fue capaz de aceptar que no era su destino... igual que yo sabía que no podría estar con Alathen... pues mi dolor me llevaría por el mismo camino... Quizá fuera cierto que una parte de él, me amaba... pero ella era más valiosa, ninguna promesa podría apagar mi ser, no sería capaz de estar a su lado sabiendo que la quería, más que a mi... Nuestro destino era adverso...

Por debilidad, descorazonada o simplemente demasiado abatida para luchar por nada, le dije adiós... solo una silueta desvaneciendose entre los naranja y púrpura de la magia y el cielo del atardecer... la última imagen en mis recuerdos, de la única persona que quise... la única persona por la que habría dado mi vida sin pensar...

  • Me Gusta 1
Enlace al post
Compartir en otros sitios
  • 5 meses atrás...

Reflexiones: La Ilusión

Regreso a Lunargenta

Me quedé por algún tiempo en Quel'Danas, de alguna forma allí me sentía a salvo. Era el único lugar donde mis temores y miedos, no me acechaban día y noche. Tenía en mi mente un nido de dudas. Había perdido el rumbo por completo y todo aquello en lo que creía, se desmoronaba en el propio razonamiento.

No fue por armarme de valor, siquiera porque la idea me agradase, pero Kairthos había insistido mucho en que debía regresar y retomar nuevas riendas para mi vida. Bonitos consejos, pero no había nada de bonito en mí, o así lo veía yo. ¿Qué vida?

Y aun así lo hice. Tomé las pocas cosas que tenía allí, me despedí de Kairthos, con la promesa de volver algún día para verle, lo típico. Siquiera esperaba saber si cumpliría esa promesa. ¿A donde iría? ¿Qué haría? Nada... ya no encontraba respuestas a esas preguntas.

El barco me dejó en el Fondeadero Vela del Sol y mis pequeños pies me llevaron hasta la entrada de la gran ciudad. Paseé un rato por ésta en silencio, ahogándome con las paredes de cada calle. Lo que antes me había parecido una aventura, llena de planes y metas por cumplir, ahora me era como una prisión. Y entonces él volvió a mi mente. Siempre estaba ahí, presente, como una sombra que acechaba mis recuerdos. Recordando que el único motivo que me impulsaba a seguir en aquél lugar, era él... por él me había quedado tanto tiempo, por él me dejé perder tantos estimables amigos, Eliyion... Lynx... Con él aposté la vida al azar y la perdí. ¿Qué hacía ahí? Nada...

Y esa misma nada me llevó a la posada, cercana a la entrada de la ciudad. Entré sin mucha expectativa, más que alquilar una habitación y refugiarme de lo que fuera, probablemente de todo, de mí misma, del exterior.

Aquella pequeña habitación y su penumbra, fue mi única compañía las primeras semanas, con las excepciones de furtivas visitas al piso inferior para pedir comida y volver a mi amarga reclusión.

Sin hablar con nadie, no lo quería, no deseaba saber nada del exterior, ni de nadie... Vertí mi soledad con la tinta sobre el papel, siendo ésta la única cosa que me mantenía despierta por las noches y dormida en el día.


~ ••• ~

La Ilusión

Eres la ilusión, que nunca terminará,

Con el manto y la máscara de la verdad que se dobla,

Y con crueles objeciones se corrompe todo lo que ves,

Hasta que no estás rodeado de todos los que creen.

Eres la ilusión, que nunca caerá,

Su dolor tu fuerza de vida, su terror es tu llamada,

Con trampa y sutileza tomas todo aquello que quieres,

Hasta que no se rompen, no pueden sangrar.

Eres la ilusión, el rostro de los condenados,

Que roba la inocencia, con todo lo que pueda herir,

Que llena con dolor y sueños desolados,

Se escuchan los gritos en el eco del silencio.

Eres la ilusión, sin embargo ahora tengo los ojos,

Te miran, viendo quién hay bajo ese disfraz,

Tratando de corromperme, y el dolor que me ha robado todo lo que amo,

Te ignoran, elevándose muy por encima.

Eres la ilusión, sin embargo ahora ya no creo,

¿Alguien puede ver, si me estás escuchando?

¿Quién estará allí para cuidar de tu máscara?

Y tu manto, ha fracasado en su propósito,

Eres la ilusión, de la que nadie escapa,

Envuelto en la oscuridad, tiritando de frio.

~ ••• ~


Y con esos versos poco a poco despertaba, en una nueva pesadilla, la pesadilla de la realidad.

  • Me Gusta 1
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Poesía: Amor, Odio y Pasión

easy_to_fall__easy_to_break_by_welcomehomejane-d4lgrzw.jpg

~ ••• ~

Amor, Odio y Pasión

Por ~ Redyan Lyrudre

Amor

Emoción que se apodera

Consume el corazón

Se afianza

y se niega

Para dejar ir

Odio

Emoción que se apodera

Consume el corazón

Se afianza

y se niega

Para dejar ir

Pasión

Emoción que alimenta

Amor y odio

En el corazón

Una droga para vivir...

Una droga para morir...

~ ••• ~

  • Me Gusta 1
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Estudios: Las Escuelas de la Magia Arcana

- Compendio y Anotaciones -

magic_circle2_by_Xyee.jpg.5f715e1ab9e306

1.- Introducción

El gran regalo de la magia puede utilizarse para muchos fines. Nosotros, los ilustrados, nos hemos dado cuenta de que es más fácil dividir las Artes Supernaturales en 7 categorías para entender mejor los principios de la magia en sí. Cada una de esas categorías se conoce como una Escuela de Magia, pues suelen aprenderse por separado y los magos suelen especializarse en uno de los tipos. Otros magos intentan dominar todas las formas de magia -*1. Pero pocos han logrado esta admirable meta. En este tomo, hablaremos sobre cada Escuela de Magia por separado y mencionaremos algunos más destacados.

Todas las Escuelas de Magia se pueden combinar para crear hechizos extraordinarios que usan múltiples fuentes de poder. Algunos de estos poderosos hechizos se explican más adelante en esta serie de libros. Pero una advertencia: Combinar varios tipos de magia puede ser muy peligroso, sobre todo para los principantes.

Aquí aprenderás los pilares de todas las Escuelas de Magia. Porfavor, recuerda que no debe abusarse de la magia. No practiques magia sin supervisión adecuada.

Info:

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

2.- Abjuración

La Abjuración es el estudio de la magia protectora y una de las Escuelas de estudio más importantes para el joven mago. El hechizo de abjuración más común es el "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" -*2, un hechizo que convierte maná en estado puro en una barrera que protege al hechicero de ataques. Si se utiliza adecuadamente. Este hechizo puede proteger al mago contra los más duros ataques, pero es dificil que un novicio domine el "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
". A veces un mago tarda meses y meses de práctica en invocar un sencillo "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
". Y por ello existen alternativas más básicas.

Se inventaron una serie de armaduras elementales para ayudar al mago viajero en el desafortunado caso de que se le atacara. Esos hechizos necesitan mucho menos energía para lanzarlos que un "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" y son más sencillos de mantener durante un tiempo. Pero no tienen la potencia natural del "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
". En vez de parar el ataque totalmente, un hechizo de "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" -3* puede disminuir la efectividad del ataque. Los hechizos de armadura más avanzados conceden otros benedicios, por ejemplo, un hechizo de armadura potente para los magos ayuda a recuperar poder mágico con mayor facilidad.

Los que practican las Artes Arcanas, suelen ser ambiciosos. Solemos encontrarnos en situaciones en las que la magia se escapa levemente de nuestro control. Por esta razón existen los hechizos de Resguardo. Éstos hechizos son conjuros rápidos y potentes para proteger al que lo lanza de cualquier daño elemental. Este daño suele producirse cuando el mago está probando otras Escuelas de magia. Por eso es tan importante estudiar Abjuración básica-4* desde el principio.

Uno de los renombrados practicantes de magia de Abjuración era el Príncipe

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
. Aunque el príncipe destacaba bastante en todas las Escuelas de magia, Kael'thas creó una variante del "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" sin igual entre los habitantes de Dalaran, llamado "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
".

También es importante el

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
, que ha perfeccionado un hechizo que combina la "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" y la Abjuración para resguardarse durante un corto periodo de tiempo mientras prepara un hechizo de efecto en área. Este hechizo "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" le proporciona a Doan casi la invulnerabilidad durante unos valiosos segundos, pero pocos magos tienen la capacidad de lanzarlo con seguridad.

Info:

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

3.- Conjuración

La Conjuración es el estudio de la invocación - ya sean criaturas u objetos. ¿Alguna vez realmente deseabas un trago de agua fresca primaveral, cuando estás en medio de la nada? Conjuración, mi amigo, es la respuesta. No hay nada más agradable para un mago que la creación de una rebanada de pan fresco o un vaso de agua. ¡Pregúntale a cualquiera de nosotros!

Especialistas más formidables en el Arte de la Conjuración pueden invocar varios vasos de agua a la vez, o quizás incluso una jarra de cerveza. El hechizo más común es "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" aunque también se conoce el de "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
", son los más básicos para cualquier mago que estudie Conjuración-*5. Algunos despistados magos en ocasiones han intentado invocar agua sin recordar el vidrio - y así fue, como nació el arte de "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
"-*6. Los Elementales de agua son el mejor amigo de un mago. (Los Canes viles no lo son, de hecho, no son amigables en absoluto). Si logras invocar a un elemental será un formidable aliado en combate, un gran oyente, e ¡incluso sabe bien!

Algunos magos han optado por seguir el camino de la invocación de refrigerio. La

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
es un buen ejemplo de maga que ha decidido adaptar sus invocaciones magicas para la batalla. Tal vez el mago más famoso de nuestro tiempo, fue el amado
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
. Aran no solo tiene reconocimiento por ser capaz de invocar varios elementales a la vez, ("
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
"), también apuntó una receta para conjurar sidra espumosa. Cabe señalar que Nileas Aran no era simple bufón. Eso es lo que tiene que ver con la magia.

Info:

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

4.- Adivinación

La Adivinación es la escuela de magia dedicada a recopilar información. Las poderosas adivinaciones pueden permitir que el mago vea objetivos a gran distancia, o incluso ver lo que normalmente es invisible. Uno de los usos más frecuentes de la magia de la Adivinación es la "Visión". Es el arte de ver lo que está lejos - incluso en otro plano de la existencia. Se suelen utilizar objetos para ayudarse a realizar hechizos de "Visión"-*7.

Ahora me gustaría recordarles a los aprendices que los cuencos de visión no son un juguete. No deben utilizarse para mostrar a estudiantes del sexo opuesto, previo pago. Ésta es mi última advertencia.

Un mago que aprenda Adivinación será capaz de recopilar datos magicos, tanto del entorno como de otros planos, información de hechizos de otros magos, detectar hechizos de la Escuela de la Ilusión y analizar rastros de magia.-*8

El legendario Archimago conocido como

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
es quizá el maestro de Adivinación más conocido. Sus potentes hechizos le permitieron ver el mundo de Draenor desde nuestro hogar en Azeroth - y tal vez incluso más allá. Sólo podemos especular sobre el verdadero alcance del poder que tenía Medivh.

Info:

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

5.- Encantamiento

El Encantamiento es el proceso de imbuir un objeto - o persona - con poder mágico-*9. Algunos encantamientos son temporales, mientras que otros pueden ofrecer beneficios permanentes. El Encantamiento puede ser difícil de aprender, pero es una de las formas de estudio potencialmente más lucrativas de la magia. Yo fomento altamente el estudio del encantamiento, ya que es uno de los estudios de magia que tiene menos probabilidades de destrucción personal.

Desencantar es el proceso de eliminación de la magia, podemos tomar de ejemplo el hechizo de "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" o "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
"-*10. El hechizo de disipar magia es uno de los más importantes en el arsenal del mago que estudia Encantamiento, ya que potencialmente puede revertir los efectos catastróficos de un hechizo fallido. También es posible de forma permanente desencantar un objeto mágico. Esto produce una forma única de maná cristalizado, como es la "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
", que se puede utilizar esta energía recuperada para realizar otro proceso de imbuir un encantamiento a otro objeto o persona. Si bien esto puede resultar caro, a menudo es una de las mejores maneras para que un joven mago pueda estudiar el proceso del encantamiento.

Si bien ya ha sido mencionado anteriormente por su habilidad en Abjuración, el Príncipe

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
también es considerado uno de los maestros más destacados en la Escuela de magia Encantamiento de nuestros tiempos. Él no sólo logró dominar la creación de potentes armas mágicas, sino que también aprendió a manipularlas de forma remota, lo que les permitía luchar por sí solas. Esto le permitía luchar como si fuera defendido por varias personas incluso estando completamente solo. Una defensa muy potente, sin duda.

Info:

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

6.- Ilusión

La Ilusión es el Arte de engañar a la realidad misma-*11. Las nieblas de la ilusión pueden hacer a un mago invisible o inaudible para el mundo o cambiar la realidad que otro cree ver por otra totalmente diferente. Las ilusiones se puede utilizar para ocultar o manipular, pero hay que tener cuidado, los hechizos para contrarrestar ilusiones existen en la escuela de Adivinación. No es recomendable basar todo el estudio en magia ilusoria.

Contrariamente a la creencia popular, las ilusiones son mucho más que meros trucos de salón. El hechizo de la "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" es uno de los más famosos en el repertorio de un mago de batalla, ya que a menudo se encontrará en situaciones de peligro y frente a la necesidad de un método rápido para una retirada estratégica, usará ese hechizo. Las ilusiones también pueden usarse para engañar a sus oponentes haciéndoles creer que el mago está en otro lugar, o incluso engañar a sus enemigos en la lucha entre sí. Ésto no es una tarea fácil, pero el ilusionista puede lograr convertir en aliados a sus enemigos - y de sus propios enemigos en aliados. Un hechizo conocido de esto último mencionado es el "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
".

La Archimaga

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
- Que su alma descanse en paz - era un ejemplo excelente de Ilusionista talentosa. En la vida, ella desarrolló un hechizo que aparecían varias imágenes propias casi indistinguibles de su forma real. Estas imágenes duplicadaban sus acciones desde diferentes lugares, por lo que es casi imposible para sus enemigos encontrarla. Era casi infalible. Lo que me lleva a otra lección - "casi" es simplemente no suficiente.

Info:

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

7.- Nigromancia

La Nigromancia es el estudio de la magia con los muertos. Se trata de una práctica ilegal que debe evitarse a toda costa. Si se menciona la nigromancia es solo porque es nuestra obligación tener un conocimiento básicos de la magia empleada por el enemigo - y no nos engañemo, cualquiera que practique ésta magia será considerado un enemigo. Los Nigromantes y sus seguidores son enemigos de todo lo vivo. Hay que evitar su influencia a cualquier precio.

La magia nigromántica tiene muchas funciones más allá de resucitar a los muertos. Los maestros de esta rama maldita de la magia pueden provocar terribles enfermedades, dominar las sombras para crear rayos de energía incendiaria y congelar a los vivos con el poder de la muerte. La Nigromancia también se utiliza para reunificar las carnes de criaturas no-muertas, permitiendo a esos espantosos monstruos volver a recuperar su funcionalidad después de ser destruidos.

El antiguo Archimago

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
es, quizás, el ejemplo más notable de Nigromante moderno. Contribuyó enormemente al contagio inicial de La Plaga y a la caída de Lordaeron. Ahora Kel'thuzad reina como exánime desde la ciudadela flotante de Naxxramas. Su presencia supone una amenaza inminente para todos.

Info:

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

8.- Transmutación

La séptima y última Escuela de Magia es la de la Transmutación. Es de las Escuelas más populares y útiles de todas, ya que permite a un mago manipular el tiempo y el espacio-*12. Tal vez su conjuro más representativo es la "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
", que permite a un mago convertir algo - o a alguien - en otra cosa. Por suerte para muchos estudiantes, los efectos no son permanentes. He visto más de un aprendiz incauto transformado en oveja, cerdo y cosas peores - ¿Y no quieres saber lo que quiere decir cosas peores?

El segundo uso más popular de la magia de transmutación es el teletransporte. El conjuro más básico de teletransporte es la "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
", y además, es de los más útiles. Puede emplearse para huir rápidamente de un enemigo o salvar a un mago que se haya caído por un barranco. No trates de utilizarlo para burlar tu propia muerte a menos que sea absolutamente necesario. Es la clase de truco que no admite más que un error.Tienes que estar absolutamente seguro de conocer tu destino antes de intentar teletransportarse.

No es casualidad que dispongamos de conjuros muy específicos para teletransportarnos a ciertos lugares: intentar teletransportarse sobre la marcha suele tener resultados catastróficos, como magos que mueren dentro de muros, sillas u otros magos. Y no lo digo de broma.

Los hechizos que manipulan el tiempo también se incluyen en esta categoría. El extendido hechizo de la "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" es una excelente alternativa a una caída mortal (y mucho más fiable que "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" para estas situaciones). Los expertos más avanzados de las Artes Arcanas también pueden aprender un hechizo que ralentiza el movimiento de sus enemigos, llamado "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
". También he oído hablar de un conjuro que aumenta la velocidad de movimiento, pero nunca lo he visto en práctica.

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
es toda una experta en la magia de Transmutación. Ha desarrollado una poderosa alternativa del popular hechizo de "Teletransporte" en masa con el que es capaz de mover a un porcentaje significativo de su ejército con el mínimo esfuerzo. Este hechizo la hace tremendamente imprescindible en el campo de batalla.

Info:

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.

<< Escrito por el

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
>>

// Traducción y añadidos por Natea.


Escala de Niveles:

Para hacerse una idea aproximada de en qué se basan estas explicaciones, cuando se mencionan los tres niveles, dentro del aprendizaje de una Escuela de Magia y Rama Magica (Arcano/Fuego/Escarcha).

  1. Nivel Básico - Podría entenderse en personajes dentro de Cobre y Bronce (Nivel 1-40). (Aprendiz)
  2. Nivel Medio - Podría entenderse en personajes dentro de Bronce y Plata (Nivel 40-60). (Arcanista/Astromante/Criomante)
  3. Nivel Superior - Podría entenderse en personajes que progresan desde Plata hasta Platino (de Nivel 60 o superior). (Gran Arcanista/Gran Astromante/Gran Criomante y Magister/Archimago)

Entre paréntesis se especifica los distintos Rangos que se usan en el Servidor, para las Academias de Magia. Estos valores son aproximados y dependerá siempre del desarrollo/evolución que cada cual le de al personaje.

Anotaciones:

*1. - Se entiende que esos "otros magos" son personajes de Lore o grandes Archimagos, con un nivel por encima de lo que puede lograr un jugador en MundoWarcraft. Nosotros no podemos lograr dominar más de dos Escuelas de Magia, como mucho.

*2. - Se entiende que el

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" es un hechizo de Abjuración que aprenderían los magos que utilizan en especialidad la Rama Arcana de magia. Su equivalente en la especialización con la Rama Escarcha es la "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
".

*3. - La "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" sería un hechizo de Abjuración de nivel medio, para Arcanistas o superior, que se especializase en la Rama de Escarcha.

*4. - Se entendería como Abjuración básica, hechizos de Resguardo, sencillos, que ayudan al mago a no hacerse daño él mismo a la hora de conjurar hechizos de Fuego o Escarcha. Podríamos tomar de ejemplo el "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" o "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
".

*5. - Los hechizos básicos de "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" y "
Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
", los conocerían aquellos magos que estudian Conjuración como Escuela Principal o Escuela Secundaria.

*6. - El hechizo de "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" sería un hechizo de nivel medio o superior, en aquellos magos que se hayan especializado en la Rama Escarcha. A su vez tendrían que ser especializados en Conjuración como Escuela principal. Su equivalente en la Rama Fuego sería "Invocar elemental de fuego" (a nivel técnico solo lo hacen los Chamanes) y a su vez el equivalente en la Rama Arcano sería "Invocar elemental de Maná".

*7. - Para comprender mejor lo que significa la escuela de Adivinación y objetos que ayudan a recopilar datos ambientales y/o de ciencia magica, ver sucesos en otros lugares. Veamos estos objetos, para comprender la mecánica:

  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Este cristal recopila información de las energías Arcanas (utilizado en una Misión de Karazhan)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Este objeto permite crear un cuenco de visión, permite ver a través una entidad/lugar específico, incluso pudiendo estar en otro plano. (utilizado en la quest de "
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    ")
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Similar al arriba mencionado.

*8. - Entendamos pues que la Escuela de la Adivinación se basa en recopilar información que el propio mundo y planos, emana. Un mago que tenga conocimientos de nivel básico podría recopilar información con la ayuda de objetos ya creados por otros magos. A un nivel medio podría crear sus propios objetos y emplear hechizos de visión o detección del uso mágico. Entendamos que cada vez que un mago realiza un hechizo o conjura, está empleando la extracción de energía Arcana de las Líneas Ley y eso deja una "huella" que el estudiante de Adivinación puede detectar, como por ejemplo tratar de recopilar los datos de hacia donde un Portal ha sido creado. A nivel superior podría llegar a ver más allá, otros planos, por poner otro ejemplo.

*9. - Es importante no confundir la Escuela de Encantamiento con la profesión de Encantador. Si bien a veces es dificultoso ver la diferencia, podemos entender que son usos distintos de la manipulación magica. Podríamos para ello utilizar esta lista de hechizos como una pequeña referencia:

  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Podría entenderse que este hechizo imbuye maná en un cristal físico, pudiendo el mago recuperar la energía en un momento de necesidad. (Nivel medio)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Este hechizo a modo rolero podría utilizarse para imbuír de energía Arcana a uno mismo u otra persona, incluso un objeto, potenciando los hechizos por un corto tiempo. (Nivel medio)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Podría entenderse que es un hechizo en el que disipa o elimina la posibilidad de que otro Taumaturgo realice un hechizo concreto, por un corto periodo de tiempo. (Nivel básico)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    o
    Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Puede rolearse como la eliminación de un hechizo en un objeto o persona. (Nivel básico)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Con este hechizo puede rolearse que el mago retiene energía de otro hechizo que es lanzado sobre él mismo u otro personaje "compañero", como defensa. (Nivel superior)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - El mago imbuye de poder a sí mismo o a otro Taumaturgo. (Nivel básico)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Siendo el mismo hechizo de arriba, pero con más nivel, con éste podría rolearse que se imbuye energía Arcana incluso a un objeto, pudiendo éste hacer que dañase con la propia magia de forma autónoma. (Nivel superior)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Podría rolearse de forma que el mago extrae un hechizo de otro mago, en el que se ha imbuído de energía o potenciación magica. Sería interesante como rol defensivo, igual que el contrahechizo. (Nivel superior)

*10. - El hechizo expuesto es solamente para comprender lo que se explica, no tomar al pie de la letra la descripción técnica. Se entiende que un mago que desencanta, estaría "disipando" o "eliminando" dicho hechizo, ya sea técnicamente una maldición o no.

*11. - Para rolear correctamente la Escuela de la Ilusión, hay que comprender muy bien como funciona el arte de la magia Arcana. El Ilusionista en la mayoría de ocasiones utiliza la manipulación, el engaño de la realidad, se "labra" el terreno para sus creaciones y en eso se basa, en la creatividad e imaginación. Hay parte de rol psicológico y de astucia, para esta Escuela de Magia.

*12. - Hay que entender bien el proceso y la ciencia que utiliza el mago cuando realiza hechizos de Transmutación y que nada tiene que ver con la especialidad de la profesión de Alquimia. El mago que estudia Transmutación se basa en la ciencia de la manipulación de la forma, densidad, espacio y tiempo. Por ejemplo, la "

Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
" cambia la densidad del cuerpo logrando que el cuerpo no descienda a una velocidad peligrosa dentro de la gravedad de la atomosfera, es un poco como la teoría de convertir el peso del plomo en peso pluma, para entendernos. Algunos hechizos de la Escuela de Transmutación, para comprenderla mejor serían:

  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Transforma y cambia la forma física de una persona en otra, normalmente se utilizan animales de poca "inteligencia", para evitar disgustos o desastres. (Nivel básico).
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Los portales transportan a otro lugar al mago u otras personas, creando un vínculo específico sobre el lugar que se está y el que se va a ir. El mago debe conocer el lugar al que va a ir. (Nivel medio).
  • Teletransporte - Se teleporta exclusivamente el propio mago/taumaturgo, a un lugar que conoce por antelación (Nivel básico).
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Este hechizo igual que otros "Buff" que otorgan lo llamado "Celeridad", puede entenderse como una manipulación del tiempo, agilizando la conjuración de hechizos. (Nivel básico)
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Un hechizo muy claro para lanzar a un enemigo e impedir que nos alcance, modificando la ciencia del tiempo en el enemigo. (Nivel medio).
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Permite al mago trasladarse a unos metros más lejos del punto en el que se encuentra. (Nivel básico).
  • Debes tener Rango Rolero, con Cuenta de Juego, o superior para ver este contenido.
    - Modifica la densidad del cuerpo haciéndolo más liviano a la gravedad, pudiendo dar un descenso lento, tanto del propiol mago, otra persona u objeto. (Nivel medio).

// Este escrito no es 100% canon, aunque se sirve de inspiración del sistema utilizado en el Servidor y doy otras tantas ideas genéricas propias/sujetivas de como aplicar tecnicismos de forma posiblemente rolera, pero advierto que no significa que eso vaya a misa y la palabra de los GM siempre estará por encima de estas ideas o representaciones si consideran que no es válido.

magic_circle2_by_Xyee.jpg.5f715e1ab9e306

  • Me Gusta 1
Enlace al post
Compartir en otros sitios

Por favor, conéctate para comentar

Podrás dejar un comentario después de conectarte



Iniciar Sesión
  • Navegando Recientemente   0 miembros

    No hay usuarios registrados viendo esta página.

×
×
  • Create New...

Información Importante

Hemos colocado cookies en su dispositivo para ayudar a mejorar este sitio web. Puedes ajustar la configuración de tus cookies, si sigues adelante daremos por hecho que estás bien para continuar.